La Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) oficializó este viernes la inscripción de Ferrosur Roca y Ferrovías en el Registro Nacional de Operadores Ferroviarios (ReNOF).
Mediante las disposiciones 122 y 123, el organismo entregó a las dos empresas su registro como “operadores ferroviarios”, un paso clave de cara a la futura implementación del acceso abierto a la red ferroviaria.
Días atrás, la CNRT ya había informado la inscripción en el ReNOF de Trenes Argentinos Cargas (BCyLSA), Ferroexpreso Pampeano (FEPSA) y Nuevo Central Argentino (NCA).
El ReNOF había sido creado en septiembre de 2015 como consecuencia de la ley 27.132 de Ferrocarriles Argentinos, pero había quedado inactivo hasta abril del año pasado. En ese entonces, la CNRT aprobó su reglamento, estableció los requisitos para que las empresas pudieran inscribirse en el registro y determinó las distintas clases de servicios ferroviarios a los que podían aspirar los operadores.
Si bien en abril pasado se les otorgó a todos los prestadores actualmente existentes el carácter de “operador ferroviario” de forma automática, se determinó que todos ellos –y eventuales nuevos interesados– deberían reinscribirse en el ReNOF y cumplimentar una serie de trámites, lo que incluye el pago de un arancel inicial y otro anual. La inscripción en el ReNOF es condición necesaria para la prestación de servicios ferroviarios de transporte de pasajeros o de cargas.
Acceso abierto: reactivaron el Registro de Operadores ferroviarios
Ferrosur Roca, actual concesionaria carguera de la línea Roca, quedó registrada bajo el código Q-0004 y obtuvo una licencia para la clase B1 (cargas generales). El contrato de la empresa vencerá el 10 de marzo del año que viene (será la última concesión en vencer). Su inscripción en el registro le permitirá seguir funcionando más allá de esa fecha, reconvertida en operadora de acceso abierto.
La forma final que adoptará este sistema, a implementar tras el vencimiento de los contratos todavía vigentes, aún es una incógnita: en los últimos meses las autoridades se han referido a la posibilidad de establecer un sistema “híbrido” que garantice una suerte de continuidad de las actuales concesionarias bajo un nuevo marco, con el argumento de la imposibilidad de implementar un acceso abierto pleno debido al deterioro del estado de la infraestructura.
Pero los detalles del esquema aún permanecen abiertos a definición, incluyendo el más importante: si el Estado recuperará efectivamente el control de la infraestructura y de los sistemas de control de circulación de trenes, como prevé la ley, o si esta seguirá de facto en manos de los privados en aquellos corredores actualmente concesionados.
El caso de Ferrovías
Ferrovías quedó registrada bajo el código P-0002 y obtuvo una licencia para la clase A1 (pasajeros urbanos). Se trata de la primera operadora de pasajeros cuya inscripción ha sido oficializada en el ReNOF, a pesar de que en abril pasado también habían recibido la inscripción automática la SOFSE, Metrovías, Tren Patagónico y Casimiro Zbikoski.
Ferrovías es la actual concesionaria de la línea Belgrano Norte, aunque opera con un contrato vencido en 2018 que ha sido sucesivamente prorrogado. La última de esas prórrogas le fue otorgada en octubre del año pasado, con vigencia hasta marzo de 2023. No obstante, está previsto que dentro de ese plazo de transición la operación de la línea -así como la de la línea Urquiza- pase a Trenes Argentinos Operaciones (SOFSE), la empresa que ya controla el resto de las líneas ferroviarias metropolitanas.
Por lo pronto, la inscripción en el ReNOF apunta a cumplimentar un paso administrativo necesario para una eventual continuidad de la operadora, ya sea en la prestación de este servicio o de otros de la misma clase.
Cabe recordar que el Gobierno mantiene formalmente vigente –aunque inactiva– la licitación lanzada durante el gobierno anterior para concesionar las líneas Belgrano Norte y Urquiza, a pesar de que esta no se condice con el marco legal vigente. Si bien choca con la anunciada decisión de reunificar ambas líneas con el resto de la red metropolitana –ya en manos del Estado desde 2015–, hasta el momento el decreto de Macri no ha sido derogado.
