Los delegados rebeldes anunciaron un paro a partir de las 11 de la mañana del jueves hasta las 5 de la mañana del viernes tras la reunión que mantuvieron en el dia de hoy con el ministro de Trabajo, Carlos Tomada. En un comunicado señalaron que “luego de haber concurrido a la convocatoria que el Ministerio de Trabajo hiciera ayer a los delegados del Subte, y de haber intentado, una vez más, a traves del diálogo con el [ministro Carlos] Tomada, que otorgue la correspondiente personería jurídica a la Asociación Gremial de Trabajadoes del Subte y Premetro (AGTSyP), debemos decir que del encuentro nos fuimos con las manos vacías”.
La última huelga, que se desarrolló el jueves pasado a partir de las 19 en plena hora pico y en un dia de altísimas temperaturas, hizo colapsar el tráfico de la Ciudad. Mañana se espera un marcado aumento en el caudal vehicular y en la cantidad de pasajeros transportados por colectivos y taxis. Un millón de pasajeros habituales del subte se verán afectados directamente por la medida, y el resto del sistema de transporte indirectamente ya que deberá absorber a los que la huelga deje de a pie.
En el comunicado, los delegados expresaron su preocupación porque Metrovías aun no entregó los recibos de sueldo, por lo que sospechan una retención compulsiva del 1% de sus haberes en concepto de cuota sindical para Unión Tranviarios Automotor, gremio con el que están enfrentados. Además, repudiaron “la presencia en los andenes de grupos violentos de barrrabravas y simpatizantes de la Unión Tranviarios Automotor, que en las últimas semanas, provocaron incidentes con destrozos, amenazas y golpes a compañeros”. El jueves, trabajadores afines a la UTA se enfrentaron con huelguistas en las estaciones Constitución (C) y Federico Lacroze (B).
Metrovías promete servicios de emergencia
En previsión de la huelga de mañana, la concesionaria Metrovías anunció en un comunicado que intentará prestar servicios de emergencia. En los anteriores paros, esto fue imposible debido a que los huelguistas cortaron las vias o se atrincheraron en las cabinas de conducción de las formaciones.
