Marruecos se encuentra en un importante proceso de ampliación y modernización de su red ferroviaria, de cara a la realización de la Copa Mundial de Fútbol en 2030, que tendrá a ese país como anfitrión junto a España y Portugal.
Con este objetivo en mente, el país norafricano busca expandir su red de alta velocidad, con la construcción de nuevos tramos entre Marrakech y Kenitra, de unos 450 kilómetros de longitud, y entre Marrakech y Agadir, de 260 km aproximadamente.
Cabe recordar que Marruecos ya cuenta con una línea de alta velocidad entre Tánger y Casablanca, que fue inaugurada en 2018 y que constituye la primera de esas características en todo el continente africano.
Además de estos nuevos sectores de alta velocidad, también se desarrollan inversiones en los sistemas de ferrocarriles metropolitanos en las ciudades de Casablanca y Rabat. Tanto los servicios metropolitanos como los de alta velocidad son operados por la empresa estatal ONCF (Office National des Chemins de Fer), dependiente del Ministerio de Transporte y Logística marroquí.
Como parte de estas inversiones, la ONCF lanzó una mega licitación internacional para la compra de 168 trenes, que tiene un presupuesto de unos 1500 millones de euros. La operación abarca 18 trenes de alta velocidad, 40 trenes interurbanos, 60 trenes de cercanías rápidos (TNR) y 50 trenes de red exprés regional (RER), que serían entregados entre 2027 y 2030.
La licitación ha despertado un fuerte interés de las empresas más importantes del sector a nivel mundial: han manifestado voluntad de participar en todas o en algunas de las categorías destacadas firmas europeas (Alstom, CAF, Talgo y TDI Innovations) y asiáticas (CRRC y Hyundai Rotem).
El objetivo tanto de las obras de infraestructura como de la compra de formaciones es preparar al sistema ferroviario para permitir un rápido traslado entre las principales ciudades y sus áreas metropolitanas, de cara a la gran afluencia de visitantes esperada para 2030.
Las autoridades del país africano apuestan por el ferrocarril como instrumento de integración territorial y de movilidad de personas, tanto en largas distancias como a nivel metropolitano, con el Estado como principal inversor.
