En la mañana de este miércoles, en un acto que fue encabezado por el presidente Mauricio Macri, se inauguró oficialmente el nuevo acceso a la estación Constitución de la línea C del Subte, que se encontraba en obra desde hace tres años. 
Del acto también participaron el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, los ministros de Espacio Público, Eduardo Macchiavelli, y de Desarrollo Urbano y Transporte, Franco Moccia, además del ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, entre otros funcionarios.
La estrella del nuevo acceso es la gran cubierta vidriada ubicada en la Plaza de la Constitución, que posee una superficie de 2000 metros cuadrados. Bajo ella se ubica un hall a nivel superficie de unos 2150 metros cuadrados. Una abertura en el techo de la estación de Subte permite el ingreso de luz natural a los andenes.
Desde allí, mediante escaleras y ascensores para personas con movilidad reducida se puede descender a la punta norte del andén central. La apuesta es descomprimir los estrechos accesos que dan a las dársenas y veredas y la sobrecargada salida a la estación ferroviaria, de la punta sur, repartiendo los flujos de pasajeros.
Además, hay nuevas escaleras de salida en los andenes laterales, que han incrementado su superficie. En el andén oeste esto fue posible ganando algunos metros al Taller Constitución, mientras que en el andén este se hizo algo similar, aunque sin esa limitación. Recostada sobre este andén se encuentra una “plaza subterránea” de unos 1500 metros cuadrados de superficie donde se encuentran locales comerciales.
La obra había sido originalmente licitada por SBASE, pero luego fue transferida al ámbito del Ministerio de Espacio Público. Su habilitación había sido prometida por el ministro Macchiavelli para fines de octubre pasado, pero el plazo no pudo cumplirse debido a demoras y contratiempos en las obras. El ritmo de ejecución de las tareas había aumentado durante el cierre de la estación por dos meses, el verano pasado.
