La Asociación Gremial de Trabajadores de Subte y Premetro (AGTSYP) anunció que este miércoles realizará medidas de fuerza en toda la red en reclamo por la crisis del asbesto.
En conferencia de prensa, los gremialistas anunciaron que las líneas A, B y D no iniciarán servicio este miércoles, con un paro que se extenderá entre las 5:30 y las 8:30. Mientras tanto, las líneas C, E, H y Premetro pararán entre las 21 y las 23:30, es decir, el horario de finalización del servicio.
El sindicato exigió una “fecha de llamado a licitación para el cambio de las flotas de las líneas B y C”, “un plan serio de desasbestización”, “introducción de todos nuestros compañeros expuestos al asbesto al RAR (Relevamiento de Agentes de Riesgo)” y la “devolución de los resultados de estudios médicos a los compañeros ya analizados y sus historias clínicas”, ya que afirman que la ART no las está entregando.
A la par, la AGTSYP presentó una “acción de amparo ambiental y acción de clase” contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Subterráneos de Buenos Aires (SBASE), Metrovías y el Metro de Madrid.
Por la tarde, Metrovías emitió un comunicado en el que aclaró que se está llevando a cabo un “Programa de Gestión Segura del Asbesto cuyo objetivo es la desasbestización integral de la red“.
Las acciones para “el recambio de piezas”, su “remoción/descontaminación, empaque, transporte y disposición final […] conforme la normativa legal […] están siendo ejecutados por la firma Borg Argentina”. La operadora también destacó que las instancias de diálogo con los trabajadores están abiertas, por lo que lamentó la realización de la medida de fuerza. En tanto, Subterráneos de Buenos Aires calificó de “injustificada” la medida.
Cabe recordar que cinco flotas de la red están afectadas por el asbesto, dos de las cuales ya fueron retiradas de servicio (CAF 5000 en la línea B y Nagoya 250/300/1200 en la línea C), mientras que una tercera (CAF-GEE de la línea E) está en vías de serlo en los próximos meses.
Continúan circulando trenes con asbesto en la línea B (trenes Mitsubishi, de 60 años de antigüedad) y en la línea C (Nagoya 5000, de 40 años). Con anterioridad al estallido de la crisis del asbesto, SBASE había mencionado la posibilidad de renovar la flota (tanto de la línea B como de la línea C) con trenes cero kilómetro, pero no hubo avances en ese sentido.