Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) anunció que este lunes 1° de diciembre reabre la estación Carlos Gardel de la línea B.
La parada se encontraba clausurada desde el 25 de agosto a causa del avance de los trabajos de puesta en valor, que fueron licitados en octubre del año pasado y adjudicados en el mes de febrero a Lo Bruno Estructuras.
Las obras realizadas consistieron en “trabajos de impermeabilización, pintura, recambio total de pisos, nuevas luces led, renovación de señalética, colocación de señalización braille en pasamanos y pórticos, y nuevo mobiliario en andén, como bancos, cestos y apoyos isquiáticos. En cuanto a impermeabilización, se ejecutaron trabajos de inyección, tratamiento de juntas y utilización de productos de última generación”, detallaron desde SBASE.
Los trabajos pendientes de finalización, por su parte, continuarán en horario nocturno.
Además, en materia de conservación patrimonial, “se trabajó en la restauración de diez murales ubicados en zona de vestíbulo y andén, un trabajo que estuvo a cargo de restauradores profesionales”, agregaron en un comunicado.
Vale recordar que las estaciones de la línea B -a diferencia de la mayoría de las estaciones históricas de la red- no son Monumento Histórico Nacional (MHN) y perdieron casi todas sus características patrimoniales gracias a las obras de “modernización” emprendidas por la entonces concesionaria Metrovías en la década del 90.
Adjudicaron la puesta en valor de las estaciones Medrano y Ángel Gallardo
Renovación de estaciones
Las obras en Carlos Gardel forman parte de un conjunto de intervenciones con las que se busca retomar el inconcluso plan de puesta en valor lanzado por SBASE en 2022.
El proyecto incluía inicialmente la renovación de un total de 20 paradas de la red, pero su ejecución había quedado trunca, ya que en principio solo llegó a concretarse una primera etapa de seis estaciones: Castro Barros y Acoyte de la línea A, General San Martín de la línea C, Bulnes de la línea D, Jujuy de la línea E y Facultad de Medicina de la línea D.
La segunda etapa, que abarcaba intervenciones en siete estaciones (Uruguay, Pasteur-AMIA, Carlos Gardel, de la línea B, y Catedral, Tribunales, Agüero y Plaza Italia, de la línea D), fue dada de baja en noviembre de 2023. No obstante, la reforma de todas ellas fue relicitada por separado durante 2024, con excepción de Catedral, que permanece pendiente.
Una tercera etapa contemplaba obras en otras seis estaciones: Lima (línea A), Carlos Pellegrini, Pueyrredón (ambas de la línea B), Diagonal Norte (línea C), Scalabrini Ortiz y Palermo (ambas de la línea D). Este grupo fue relicitado y ya intervenido, aunque con la excepción de Pellegrini y Diagonal Norte.
A estas se sumaron luego licitaciones para estaciones no contempladas en el plan original: Malabia (línea B), Piedras, Congreso, Loria y Río de Janeiro de la línea A, y en Medrano y Ángel Gallardo (línea B), esta última recientemente adjudicada.
A su vez, a estas obras de refacción integral se agregaron otras dos licitaciones: una para realizar tareas de conservación preventivas y reparaciones correctivas en todas las estaciones de la red que lo requieran, siempre que no hayan sido intervenidas en el plan de renovación de paradas, y otra para la restauración de murales en cuatro estaciones ya intervenidas.
Actualmente, suman seis las estaciones cerradas por obras de refacción: Plaza Italia (línea D), Agüero (línea D), Uruguay (línea B), Río de Janeiro (línea A), Loria (línea A) y Congreso (línea A).
Las puestas en valor de estaciones constituyen, junto con la renovación de escaleras y ascensores, una de las pocas obras para el Subte que estaban contempladas en el Presupuesto 2025.
Si bien la norma aprobada incluía la finalización de los trabajos del Nodo Obelisco y de la modernización del señalamiento de la línea D y el proyecto para cerrar del loop del Premetro, así como trabajos de menor cuantía, como mejoras en talleres y depósitos y la compra de nuevas escaleras mecánicas y ascensores, no consideraba la construcción de nuevas estaciones.
El Presupuesto 2026, cuya aprobación aún está pendiente en la Legislatura, incluye la compra de nuevos trenes -29 para la línea B, operación ya adjudicada y con contrato firmado, y ocho adicionales para las líneas A y C– y para la primera etapa de la futura línea F, cuya licitación fue lanzada por el GCBA en octubre pasado.
Otras obras recientemente lanzadas para la línea B, que comprenden trabajos de renovación de vías, elevación de tensión y tareas en el sistema eléctrico, serán financiadas con un crédito de la CAF, que aún está pendiente de aprobación por parte de la Legislatura.
Presupuesto 2026: cuáles son las obras proyectadas para el Subte y cuáles quedaron afuera


