El Metro de Santiago lanzó una licitación para la compra y el mantenimiento de nuevos trenes para la futura línea 7.
Según se informó, se adquirirán 37 trenes de cinco coches cada uno, con una capacidad máxima de 1250 pasajeros por formación. Se tratará de trenes de conducción automática en GoA 4, el máximo grado de automatización; es decir, sin conducción humana.
La red de la capital trasandina tiene experiencia en este tipo de operación: las líneas 3 y 6, en las que operan trenes CAF AS-14, también están completamente automatizadas. Las empresas interesadas en participar de la licitación deberán demostrar amplios antecedentes en la fabricación de material rodante automatizado.
Si bien a lo largo de su toda su historia el Metro de Santiago ha adquirido únicamente material rodante de la francesa Alstom y -más recientemente- de la española CAF, la prensa trasandina especula con que la china CRRC es firme candidata a participar de la compulsa e incluso ganarla.
Esto se debe a que en los últimos años CRRC ha reforzado su presencia en el mercado ferroviario trasandino, con sendos contratos para la provisión de trenes para la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), tanto para los servicios suburbanos de Concepción como para el renovado servicio Santiago – Chillán. Fuera del vecino país, CRRC cuenta con presencia en la Argentina, Colombia, México y los Estados Unidos.
La futura línea 7 del Metro de Santiago cruzará la ciudad de oeste a este, uniendo Renca y Vitacura. Tendrá 26 kilómetros de extensión y 19 estaciones, ofreciendo combinaciones con las líneas 1, 2, 3, 5 y 6. Su construcción fue anunciada a mediados de 2017 y se estima que las obras comenzarán en el transcurso de este año 2021. La línea estaría terminada para 2026 o 2027. La inversión prevista es de más de 2500 millones de dólares.
