El proyecto del Jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta para extender el contrato vigente con Metrovías por un año más, hasta que se resuelva la licitación para elegir a un nuevo concesionario para el Subte, fue recibido con críticas por la oposición porteña.
El malestar de los legisladores se explica por la “improvisación” con la que entienden que el Gobierno porteño abordó la cuestión.
Apenas días atrás tanto el ministro de Desarrollo Urbano y Transporte, Franco Moccia, como el presidente de Subterráneos de Buenos Aires (SBASE), Eduardo de Montmollin, habían sostenido ante la Legislatura que el cronograma de la licitación marchaba según lo previsto. Esto fue antes de que la comisión evaluadora pidiera 45 días hábiles más para analizar las ofertas técnicas, lo que demoraría la apertura de los sobres con la oferta económica y la adjudicación de la licitación hasta el primer trimestre del año próximo.
Desde SBASE, en tanto, le bajaron el tono a la polémica por la prórroga y aseguraron que es una mera formalidad para permitir “una transición ordenada” entre la gestión de Metrovías y el nuevo operador que resulte de la adjudicación. Esta posibilidad había sido adelantada por De Montmollin a enelSubte en octubre pasado.
Es evidente el fracaso del GCBA en el proceso licitatorio de #Subte. Ante el nuevo pedido de prórroga de 1 año a la cuestionada Metrovias, presenté junto a la legisladora Ma. Rosa Muiños un proyecto de ley para que la concesión pase a manos de AUSA con control de SBASE. pic.twitter.com/gsQVOJMK2Z
— Sergio Abrevaya (@SergioAbrevaya) November 14, 2018
Uno de los primeros diputados en plantear sus reparos fue Sergio Abrevaya (GEN). En diálogo con enelSubte el legislador explicó que plantea una “solución superadora” con un proyecto presentado en conjunto con la legisladora María Rosa Muiños, que contempla entregar la concesión de la operación y el mantenimiento de la red a la empresa estatal Autopistas Urbanas (AUSA). Abrevaya ponderó las capacidades técnicas de AUSA, que le permitirían hacerse cargo de la red “en el corto plazo” y al mismo tiempo apuntó que al tratarse de una sociedad anónima (y no de una sociedad del Estado, como SBASE), tendría mayor agilidad para los procedimientos. AUSA, cabe recordar, ya financia parte de las obras de expansión del Subte y hay propuestas en la Legislatura para que aumente su participación en ese sentido.
Para Abrevaya el proceso de licitación actualmente en marcha, donde compiten los consorcios Roggio-Metrovías, Keolis-Helport y RATP-Alstom, debería ser “suspendido” ya que “es impugnable”. Entre otros factores, Abrevaya apunta que “está en competencia Metrovías, que es una empresa de Roggio, involucrado en el caso Cuadernos“. Cabe recordar que Aldo Roggio, que quedó como “imputado colaborador” en la causa, renunció en agosto pasado a la presidencia del holding, donde fue sustituido por su hermana Graciela Roggio.
Desde el bloque Evolución, en tanto, la diputada María Inés Gorbea recordó que su partido había presentado el año pasado un proyecto para que el Estado se hiciera cargo del servicio a través de SBASE. “Creemos que el Subte tiene que ser operado por la Ciudad. Vamos a insistir“, aseguró Gorbea, quien responde al sector del diputado nacional Martín Lousteau.
La iniciativa del ejecutivo que deberá tratarse antes de fin de año, requiere de mayoría simple para su aprobación (31 votos). El bloque oficialista cuenta con 34 diputados, por lo que se descuenta que será aprobado.