La concesionaria Ferrovías anunció que desde este martes 25 de julio la línea Belgrano Norte circulará con un nuevo horario.
El nuevo diagrama implica un recorte del 33% en la cantidad de servicios, así como una reducción en la ventana horaria de las prestaciones.
Se trata de un recorte similar al que se había anunciado a principios de mes, cuya implementación fue frenada luego de las quejas de los usuarios.
Al suspender su puesta en marcha, Ferrovías había explicado que se evaluaría la manera de realizar el recorte procurando minimizar el impacto sobre los pasajeros: si bien el nuevo diagrama es similar al que no llegó a implementarse, se suavizaron algunos de sus aspectos, manteniéndose la frecuencia en algunas franjas horarias.
En comparación con el horario hasta ahora vigente, la línea pasa de tener 163 trenes diarios totales en días hábiles a 113. En tanto que sólo 32 de los 57 servicios diarios que llegaban a Villa Rosa lo seguirán haciendo. El resto de los servicios circularán únicamente hasta Boulogne o Grand Bourg.
Al igual que en el malogrado diagrama que se iba a implementar a principios de mes, el último servicio a Villa Rosa saldrá de Retiro a las 22:10, en contraste con el último tren de las 23:45 en el horario hasta ahora vigente. Se trata de una reducción de más de una hora y media en la ventana de servicio nocturna que afecta también a los pasajeros del tramo entre Boulogne y Grand Bourg: todos los servicios que parten desde Retiro detrás del de las 22:10 sólo circularán hasta Boulogne. También desaparecen los servicios cortos de Retiro a Boulogne de las 0:10 y la 1:00 y el primero de la mañana siguiente.
En la frecuencia es donde más se advierten las diferencias con el diagrama cuya implementación no prosperó: en horario pico se mantiene la actual frecuencia de 15 minutos en el tramo Retiro – Grand Bourg, aunque en el resto de las franjas horarias el tiempo de espera se incrementará a 25 minutos.
De acuerdo con la operadora Ferrovías, el recorte de los servicios se debe a la necesidad de realizar trabajos de mantenimiento sobre el material rodante y tractivo de la línea, imposibles de realizar sin retirar parte del parque del servicio.
La línea viene arrastrando problemas de funcionamiento desde hace años, siendo el mayor exponente de estos la crisis tractiva del año 2018. No es tampoco la única línea con problemas por esta causa: en similares situaciones se hallan las líneas San Martín (ver nota aparte), Belgrano Sur, Mitre y los servicios de larga distancia.
Cabe recordar que el servicio es prestado con coches remolcados y locomotoras de más de 50 años de antigüedad. Si bien la línea tiene asignado un parque de máquinas “propias”, lo cierto es que es habitual encontrar formaciones traccionadas por locomotoras a préstamo de la estatal Trenes Argentinos Cargas.
Vale notar que si bien la línea ha recibido cuantiosas inversiones del Estado en términos de infraestructura -sistema ATS, nuevas estaciones, de las que sólo restan inaugurar dos-, hasta el momento ha quedado marginada -al igual que la otra línea concesionada, el Urquiza- de la renovación de material rodante encarada en las líneas que administra Trenes Argentinos (SOFSE).
Actualmente existen tratativas con China para realizar la electrificación, la renovación de vías y la compra de nuevo material rodante eléctrico, pero el plan no tiene avances concretos hasta el momento y parece encontrarse estancado como casi todos los acuerdos con el país asiático. En todo caso, cualquiera de estas inversiones correrá por cuenta del Estado a pesar de que la línea continúa concesionada y de que el Gobierno dejó firme la decisión de volver a licitar su administración a una empresa privada.
En lo inmediato, los pasajeros del Belgrano Norte deberán afrontar la menor cantidad de servicios en dos décadas.
