Con el arribo durante este martes del primer tren cargado al Puerto de Montevideo quedará oficialmente inaugurado el proyecto del Ferrocarril Central en Uruguay.
Según explicaron fuentes oficiales del vecino país, la primera formación estará compuesta por una locomotora con 13 vagones cargados con pasta de celulosa, proveniente de la planta de UPM en Paso de los Toros. Se trata de la primera vez en 30 años que un tren ingresa a la terminal portuaria.
Durante el pasado mes se venían realizando las últimas pruebas de carga, que tenían como objetivo evaluar el tendido y el señalamiento en conjunto con los operadores, con vistas al pronto inicio de operaciones regulares.
El proyecto, que fue licitado en 2017 durante el gobierno de Tabaré Vázquez (Frente Amplio) y continuado por la actual administración de Luis Lacalle Pou (Partido Nacional), fue financiado por el Estado nacional y tenía como objetivo la puesta a punto de la infraestructura de vía entre Paso de los Toros (Tacuarembó) y el puerto de Montevideo.
Los trabajos consistieron en la renovación de 273 kilómetros de vía que atraviesa cinco departamentos: Montevideo, Canelones, Florida, Durazno y Tacuarembó. Se reemplazó totalmente la infraestructura anterior, contando ahora con riel continuo soldado, durmientes de hormigón y una capa de balasto de 30 cm de espesor. Asimismo, se renovó el señalamiento, se intervinieron pasos a nivel y se construyó infraestructura para un eventual servicio de pasajeros.
Si bien se proyectaba que los trabajos estarían terminados hace varios meses, diversos contratiempos fueron surgiendo a lo largo de la ejecución de la obra. Los mayores desafíos se presentaron en el área urbana de Montevideo, donde tuvieron que hacerse diversas intervenciones en función de los requerimientos de las autoridades locales.
El proyecto despertó el interés de operadores privados. En un primer momento se transportará la carga de la citada empresa UPM, que planea realizar seis viajes por día. Por su parte, el grupo logístico RAS pretende transportar carga por este corredor y ya firmó contratos para movilizar contenedores, celulosa y madera. Para ello, está realizando una importante inversión en material tractivo.
La experiencia uruguaya muestra la importancia del Estado como inversor y poseedor de la infraestructura ferroviaria. La maginitud de las inversiones que requiere montar un nuevo tendido difícilmente puede ser afrontada por el sector privado y este caso muestra que si el sector público realiza los desembolsos se genera una respuesta positiva del entramado productivo.