El Metro de Madrid sacó a venta un total de 103 coches CAF Serie 5000, que tienen presencia de asbesto -un material cancerígeno- entre sus componentes eléctricos, confirmó la empresa días atrás. Debido a que violó las normas de seguridad relativas al manejo de este material, el Ministerio de Trabajo español multó al Metro de Madrid por una suma equivalente a cinco millones de pesos argentinos.
Los coches que salen a subasta pertenecen a las subseries tercera y primera. A esta última pertenecen los 36 coches comprados por Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) para la línea B. Las unidades fueron retiradas de servicio en forma preventiva por el Subte.
El “proceso de enajenación” de los coches comenzó en diciembre pasado y está orientado a empresas de desguace, reciclaje y gestión de residuos, ya que los coches tienen más de 40 años de antigüedad. Al menos dos empresas españolas del rubro, Lajo y Rodríguez S.A. (LYRSA) y Gestión de Desguaces y Recuperación S.L., se han presentado a la compulsa, que actualmente se encuentra en período de evaluación de ofertas.
Los coches ya habían superado ampliamente su vida útil programada cuando fueron vendidos en 2011 al Subte. En aquel entonces el diario El País había calificado a los coches como “carne de chatarrería”. De hecho, algunas unidades desafectadas fueron utilizadas para evaluar el comportamiento de un coche en la eventualidad de un atentado terrorista.
El precio base de los 103 coches es de casi 422 mil euros, IVA incluido, menos de 4100 euros por coche. Cabe recordar que en 2011 SBASE abonó unos 550 mil dólares por cada unidad.