El Gobierno de la Ciudad proyecta importantes cambios en el recorrido de las líneas 61 y 62 de colectivos.
Días atrás, el Ministerio de Infraestructura porteño publicó una convocatoria a un foro de participación ciudadana para tratar los cambios propuestos, por un plazo de 15 días.
Se trata del mismo mecanismo participativo utilizado para la ya concretada fusión de las líneas 6 y 50, para la creación del nuevo ramal a la Villa 21-24 de la línea 118, y para la extensión del recorrido de la línea 102. La reciente habilitación del desdoblamiento de la línea 12 en Barracas no fue incluida en este mecanismo al tratarse de una modificación con carácter experimental. Esta instancia será habilitada para todos los eventuales cambios en los recorridos cuya gestión fue transferida a la órbita porteña.
De acuerdo con lo publicado por el Ministerio, el recorrido principal de ambas líneas se mantendría sin cambios significativos, pero se crearían nuevos ramales.
Tanto la 61 como la 62 sumarían un ramal “B” que se desviaría del recorrido troncal para incorporar el paso por el barrio Rodrigo Bueno y por el barrio de Puerto Madero, de acuerdo con el mapa publicado debajo, dando cobertura a una zona de la ciudad que cuenta con escasa conectividad.
A su vez, la línea 61 sumaría servicios cortos entre Retiro y Constitución y entre Constitución y Once. En tanto que la línea 62 también incorporaría un corto entre Retiro y Constitución. Estos servicios fraccionados se prestarían únicamente en horario diurno (de 6 a 20).
Cabe señalar que la traza de las líneas 61 y 62 es una de las más particulares de Buenos Aires, al tratarse de recorridos circulares (en sentido horario y antihorario) que descienden de los antiguos trolebuses 311 y 312 de Transportes de Buenos Aires -y anteriormente, de líneas tranviarias-.
Ambas líneas, además, realizan un recorrido que rodea al macrocentro porteño, uniendo las tres principales terminales ferroviarias (Plaza Constitución, Once y Retiro), la Casa Rosada y la Facultad de Derecho, además de permitir combinar con numerosas estaciones del Subte.
Vale notar, además, que unidades de la línea 62 fueron las seleccionadas por el Gobierno de la Ciudad para presentar por primera vez el polémico ploteo de unidades aplicado a los coches de las líneas bajo jurisdicción porteña, hacia fines del año pasado.
Las líneas son actualmente operadas por la empresa La Central de Vicente López, bajo el nombre de fantasía “Misión Buenos Aires”, que es controlada por el grupo misionero Zbikoski, uno de los principales operadores del cada vez más concentrado mercado del transporte público en el AMBA. Anteriormente, la 61 y 62 fueron las “líneas madre” del extinto Grupo Plaza, desaparecido en 2017.
El grupo, que también opera las líneas 114, 129, 143 y 145 -todas ellas heredadas de Plaza, aunque la última con otro número y diferente razón social-, tiene en trámite modificaciones para otras de sus líneas. En el caso de la 114, su extensión hasta el Aeroparque, y en el caso de la 129, su desdoblamiento en dos líneas: 129 para los ramales a La Plata y 197 para los urbanos.