La semana pasada, Trenes Argentinos Infraestructura (ADIF) lanzó una licitación para modernizar y reconstruir las estaciones de la línea Belgrano Norte, obras que incluyen la elevación de todos los andenes. La reforma de estaciones está dividida en nueve renglones integrados por dos o tres estaciones cada uno.
El pliego contempla también a la aún no inaugurada estación Panamericana, originalmente planteada con andén alto, pero luego modificada por la actual gestión –que ahora licita su elevación– para que se construyera con andenes bajos.
Las bases también incluyen dos renglones referidos a tratamiento mecanizado de vías en las 23 estaciones a intervenir y al “señalamiento integral definitivo” en las estaciones Retiro, Saldías, Ciudad Universitaria, Munro, Boulogne, Los Polvorines, Grand Bourg y Panamericana.
El diseño de las estaciones responde a los lineamientos de las paradas reformadas desde 2014 en adelante, un diseño aplicado en casi todas las líneas metropolitanas y hasta en la estación Rosario Sur. La primera estación de esta serie fue Villa Luro, en el Ferrocarril Sarmiento, que oportunamente el entonces ministro Randazzo había presentado como modelo a futuro. En el caso del Belgrano Norte se planea conservar los edificios históricos de las estaciones originales de la línea, mientras que serían removidos íntegramente los actuales refugios de estaciones como Tortuguitas o Tierras Altas.
El anuncio del Gobierno causó sorpresa en el ámbito ferroviario, ya que la línea Belgrano Norte opera con trenes diésel convencionales para andén bajo (coches remolcados con escalerilla) y no existen actualmente planes para renovar su material rodante por coches para andén alto.
De hecho, son pocos los coches de este tipo que tiene la línea: los coches motores Emepa Alerce son un ejemplo de esto. Originalmente se habían encargado veinte formaciones que serían destinadas a un servicio diferencial, luego cancelado en el marco de la crisis de material rodante que afectó al Belgrano Norte durante el año pasado. Tras la suspensión del proyecto del diferencial, el Ministerio de Transporte decidió que los coches que se terminen a futuro sean transferidos a servicios regionales. La semana pasada una formación fue entregada por el ministro Dietrich al servicio Salta – Güemes y se estima que la próxima será enviada al Tren de las Sierras, que une Córdoba con Cosquín.
La única compra de material rodante para andén elevado en la que actualmente se trabaja es la de 174 formaciones eléctricas que eventualmente circularían por la RER; no obstante, esos trenes son de trocha ancha, totalmente incompatibles con la línea Belgrano Norte, de trocha métrica.
A su vez, tampoco se conocen proyectos concretos para electrificar en el mediano plazo la línea Belgrano Norte. El único anuncio que Transporte había realizado al momento fue un programa de mantenimiento, promocionado entonces como un pomposo “plan de inversión”. La continuidad de la concesionaria Ferrovías más allá del vencimiento de su contrato, en cambio, aparece cada vez más como el horizonte más probable.