Una consecuencias de los años electorales, y más cuando lo que se renueva o ratifica es la conducción del Poder Ejecutivo, es el creciente aumento del gasto público, principalmente en subsidios a servicios y obras públicas.
Este año no es la excepción. Un informe de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP) reveló que los subsidios al transporte público de pasajeros llevaron a una sobre-ejecución del presupuesto general.
Con esta decisión, se prevé que en los próximos meses podrían concretarse nuevas modificaciones a la “ley de leyes” a través de Decretos de Necesidad y Urgencia (en manos del presidente Néstor Kirchner) o de decisiones administrativas o “superpoderes” (en manos del jefe de Gabinete, Alberto Fernández).
De acuerdo con el trabajo de la ASAP, la sobre-ejecución del gasto global, que a mayo de este año supera en tres puntos porcentuales el nivel teórico, se debe principalmente a las erogaciones de determinados programas de los ministerios de Planificación de Julio De Vido y de Trabajo de Carlos Tomada.
Entre ellos, el que marca el mayor nivel de sobre-ejecución es el programa “Formulación y Ejecución de Políticas del Transporte Automotor y Ferroviario”, denominación que corresponde a los subsidios a trenes, subtes y colectivos de corta y larga distancia custodiados bajo la órbita del cuestionado Ricardo Jaime.
Si bien para la ONG presidida por el asesor de la Subsecretaria de Presupuesto de la Nación, Roberto Martirene, se considera que a mayo el nivel teórico de ejecución presupuestaria al transporte se ubica en el orden del 37,7 por ciento del total anual, los subsidios otorgados en los primeros cinco meses alcanzan el 89 por ciento (1.374 millones de pesos) del crédito vigente.
La brecha podría incrementarse aún más si se tiene en cuenta que en junio (con posterioridad al período analizado por la ASAP) se emitió la decisión administrativa 216/07, que incrementa los subsidios al transporte de pasajeros en 327 millones de pesos, con lo que se duplicaría el margen de 11 por ciento que le resta al programa 55 y, en consecuencia, en seis meses se sobrepasaría el crédito establecido para todo el año.