El pasado lunes 25 de abril un trabajador del Taller Urquiza, ubicado a continuación de la terminal Juan Manuel de Rosas de la línea B, recibió una descarga eléctrica mientras trabajaba en una formación, lo que le produjo quemaduras varias.
El incidente ocurrió cuando el operario se encontraba cambiando un transductor de una formación CAF 5000, produciéndose un arco voltaico que le provocó quemaduras en ambas manos, en los brazos y en el rostro. Según informaron voceros de Metrovías a este medio, la causa del hecho fue que el tren no había sido desenergizado al momento de realizar esa tarea, “tal como lo recomiendan las normas operativas para estos casos”.
El individuo afectado fue asistido inmediatamente por personal del SAME, que le brindó los primeros auxilios, y fue derivado al Sanatorio de la Trinidad Mitre, donde permaneció internado y “en todo momento fue asistido y acompañado por personal de la empresa”, informó Metrovías.
Si bien evolucionó favorablemente con el correr de los días, trabajadores de la línea B aseguraron que al afectado “le aguarda una larga recuperación” y que las manos resultaron la parte más comprometida de su cuerpo. La operadora Metrovías se limitó a destacar que el empleado “se encuentra estable y evolucionando sin complicaciones”.
En tanto, la conducción de AGTSyP emitió un comunicado reclamando por las condiciones de trabajo en los talleres, asegurando que “en los últimos años estas condiciones de inseguridad han costado la vida de cuatro trabajadores e infinidad de accidentes por electrocución”.