Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) indicó que espera tener listo para junio el nuevo pasillo de combinación entre las líneas B y C bajo el Obelisco. Dicha obra, que forma parte del plan de ampliación del Nodo Obelisco -donde combinan las líneas B, C y D bajo dicho monumento-, implica la construcción de un pasillo de 130 metros de largo y que permitirá conectar de forma directa el entrepiso de la estación Carlos Pellegrini de la línea B con los andenes de Diagonal Norte de la C evitando, así, utilizar el andén a Catedral de la estación 9 de Julio de la línea D para dicho recorrido.
Hasta el momento la obra, que fue visitada por enelSubte.com, registra un avance de 17 por ciento y se ha concentrado fundamentalmente en la remoción de interferencias que se encuentran bajo las veredas tales como caños de gas o tendidos de electricidad; de ellas, la más complicada será la mudanza de una subestación eléctrica.
No obstante, parte del trabajo de excavación del nuevo pasaje ya está hecho puesto que se aprovechó el hall de acceso que la línea D tenía en el andén a Catedral de 9 de Julio donde se encontraban una boletería, escaleras de salida a la calle Sarmiento, vestuarios, salas técnicas y baños públicos. Las mayólicas de dichas instalaciones, originales de la construcción de la línea, fueron retiradas y se volverán a poner en el pasillo nuevo, prometieron desde SBASE.
Esta parte final de los trabajos es la más importante de todo el plan que comenzó, aunque en una versión diluida respecto del proyecto original, a ejecutarse a finales de 2017 y del que ya se terminaron un nuevo acceso compartido para las tres estaciones sobre la calle Sarmiento y la construcción de salas técnicas, instalación de ascensores y escaleras mecánicas en el punto más conflictivo de toda la red.
Por el Nodo Obelisco transitaban unas 300.000 personas al día antes de la pandemia y, de acuerdo con estimaciones de SBASE, si bien hoy circula un 70 por ciento de aquel guarismo se espera que la demanda termine de recuperarse en el mediano plazo. Por lo tanto, resulta imperativa la finalización de la obra de este pasillo, luego de las demoras registradas en el último tiempo, para evitar que dicho volumen de personas se desplace por el andén de la línea D, ya de por sí saturado por el propio tráfico que aporta dicha línea.
