Continúa la ola de cancelaciones de obras ferroviarias que estaban en marcha. Tras la baja de las obras de señalamiento del Tren Universitario y de nuevas estaciones en la línea Roca, Trenes Argentinos dio de baja los trabajos de reforma de la estación José C. Paz de la línea San Martín.
De acuerdo a un documento oficial, al que tuvo acceso enelSubte, Trenes Argentinos Infraestructura (ADIF) decidió dar de baja las obras civiles de reforma y ampliación de la estación, que formaban parte de una licitación más amplia lanzada en 2021 y que habían sido adjudicados a la constructora Teximco.
Los trabajos, que incluían la construcción de nuevos andenes, un nuevo puente peatonal, nuevas dependencias para el personal, accesos más amplios, sanitarios y boleterías, así como mejoras en el entorno, marcharon a buen ritmo hasta que fueron frenados con el cambio de gestión a fines de 2023.
El argumento oficial para dejar de lado la obra es calcado de otros proyectos cancelados: no forma parte de la Emergencia Ferroviaria y “no podría ser considerada crítica o indispensable con relación a la seguridad y funcionamiento del sistema ferroviario”.
Ante la decisión oficial de abandonar la obra, la Municipalidad de José C. Paz realizó una presentación ante la ADIF, manifestando la “intención de finalizar a su costo las tareas pendientes”, atento que la estación “resulta ser terminal y punto de conexión a localidades siguientes que provoca una alta densidad de tránsito de pasajeros”.
A su vez, las autoridades locales manifestaron su preocupación ante la posibilidad de que el abandono del proyecto pueda derivar en “la usurpación del predio” ubicado en las inmediaciones de la estación.
No es la primera vez que los municipios deciden hacerse cargo de obras abandonadas por el Estado nacional: situaciones similares se dieron en los casos de las estaciones Hospital Ezeiza y Universidad de Almirante Brown de la línea Roca (ver detalle debajo).
El costo de la paralización de los trabajos -que en el caso de las estaciones del Roca, y de acuerdo a estimaciones oficiales, le costó al Estado cerca de 264 millones de pesos-, sumado a los riesgos de usurpaciones y deterioro de las instalaciones ya terminadas pone en entredicho el argumento oficial del ahorro fiscal derivado de la paralización de la obra pública.
El Gobierno estima que gastó $264 millones por paralizar las obras de nuevas estaciones en el Roca
Vale notar que la cancelación de los trabajos en José C. Paz se suma a numerosos proyectos dados de baja en la línea San Martín.
Entre ellos se cuenta la caída de la licitación para la renovación de vías y señalamiento entre Retiro y Pilar, que fue dada de baja en marzo pasado, el abandono del proyecto de electrificación de la línea, que iba a ejecutarse con un crédito del BID que fue redestinado a otros fines no ferroviarios y removido del proyecto de Presupuesto 2026, e incluso proyectos que habían sido incluidos en la Emergencia Ferroviaria, como la reforma de la estación Palermo, que semanas atrás fue dada de baja por segunda vez.
Al mismo tiempo, se encuentra paralizada la reparación de las 24 locomotoras de la línea, adjudicada hace ya casi dos años. Por otra parte, se desconoce si existen avances sobre la reactivación de una compra de tres nuevas locomotoras chinas para la línea.
Sigue demorada la reparación de locomotoras de la línea San Martín
Ola de cancelaciones
La baja de la licitación se enmarca en una ola de cancelaciones de trabajos, que alcanza tanto a obras en curso como previstas. A las mencionadas en la línea San Martín se suman múltiples proyectos en el resto de las líneas.
En la línea Sarmiento fue dada de baja una licitación para la construcción de nuevos andenes en las estaciones Liniers y Ciudadela.
En la línea Roca, fueron rescindidos los contratos de construcción de las nuevas estaciones Quilmes Sur, Universidad de Almirante Brown y Hospital Ezeiza, cuya paralización le costó al Estado cientos de millones de pesos. Las últimas dos fueron transferidas a los respectivos municipios para su finalización.
A su vez, fue cancelada la licitación para la reforma de la estación Hipólito Yrigoyen, que está cerrada desde hace casi dos años por obras que nunca comenzaron, y la instalación de cerramientos perimetrales en tramos faltantes de la línea, a la vez que se dieron de baja obras de señalamiento en el Tren Universitario de La Plata.
En la línea Mitre, se canceló la obra de electrificación Victoria – El Talar y se frenaron los trabajos de la estación Nordelta, cuya eventual reanudación quedó supeditada a la celebración de un acuerdo con la desarrolladora inmobiliaria.
En la línea Belgrano Sur se encuentra paralizada la obra del viaducto a Constitución, al mismo tiempo que fue cancelada la obra de electrificación y modernización de la línea, que iba a ejecutarse con un crédito del Banco Mundial.
Incluso proyectos que habían sido contemplados en la “Emergencia Ferroviaria”, como la compra de nuevas triplas para servicios suburbanos y regionales, fueron dados de baja.
Ni siquiera se salvaron del recorte los proyectos cargueros: la circunvalación ferroviaria de Santa Fe se encuentra paralizada, mientras que los créditos chinos para la renovación del Belgrano Cargas y el San Martín Cargas fueron puestos en el freezer. Hasta las licitaciones para trabajos menores de mantenimiento en el sistema carguero han sido víctimas de esta paralización.
En contraste, en las últimas semanas, los únicos trámites que avanzaron fueron las obras para las líneas privatizadas, como el Urquiza o el Belgrano Norte -los contratos vencidos de sus operadores, por otra parte, fueron nuevamente extendidos-, los destinados a viabilizar la futura privatización de las líneas de gestión estatal, o aquellas reactivadas con criterios electoralistas, como el paso bajo nivel de Junín, frenado desde inicios de la gestión actual.
Dan de baja por segunda vez una obra de mejoramiento de vías en el San Martín