Metrovías despidió a seis empleados jerárquicos presuntamente involucrados en una trama de estafa a 350 trabajadores del Subte, a quienes se les habría solicitado dinero a cambio de planes de vivienda inexistentes, por un monto total de 35 millones de pesos.
Se trata de seis empleados, “jefes de estación y supervisores” de las líneas B y C, que habían sido separados de sus cargos hasta tanto se aclarara la investigación. Metrovías decidió, “independientemente” de las acciones judiciales que se tomen, proceder al despido con justa causa de los supuestos involucrados.
El caso tomó estado público luego de que el legislador Campagnoli (Nuevo Encuentro) denunciara el hecho ante la Justicia penal. Según publicó el matutino Página 12 “los damnificados pagaban un depósito inicial de entre 70 y 150 mil pesos” por viviendas que supuestamente entregaría el Instituto de Vivienda de la Ciudad.
Tras la denuncia, el martes por la noche un delegado de la línea C, Federico Borgo, fue golpeado y amenazado a punta de pistola para que cesasen las denuncias relativas a la estafa. Ante lo que calificaron como un “apriete”, los Metrodelegados decidieron realizar un breve paro de una hora en la línea C el miércoles 20.