Los representantes de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (AGTSyP) ofrecieron una conferencia de prensa en la que explicaron cuál es el estado de situación del conflicto que mantiene paralizado el servicio de subterráneos desde hace nueve días.
El subsecretario general de AGTSyP, Roberto Pianelli contó que el viernes estuvieron a punto de llegar a un acuerdo, porque los metrodelegados estaban dispuestos a extender el plazo de la discusión salarial, si les garantizaban algunas mejoras en la cantidad de días de licencia por enfermedad, maternidad y vacaciones, entre otras cuestiones.
El gremialista remarcó que mantienen ese “gesto conciliador” y por eso “hasta las 12 de la noche de hoy vamos a esperar que se produzca un llamado para firmar este acuerdo y que mañana haya subtes”.
El que resumió de manera clara cómo se soluciona esta medida de fuerza fue el metrodelegado Néstor Segovia, quien les envió un mensaje concreto a Mauricio Macri y a la empresa Metrovías: “Tenemos el acta acá, está en manos de ustedes si quieren resolver el conflicto. Y si no quieren háganse cargo, porque los trabajadores no vamos a dar un paso atrás si no conseguimos el aumento y las condiciones de trabajo”.
El gremialista también se refirió a las acusaciones del jefe de Gobierno, quien señaló que los metrodelegados eran un invento del kirchnerismo y algunos estaban en La Cámpora.
Segovia consideró que ese fue “un gesto de debilidad” de Macri. Y apuntó: “Sí, soy militante: estuve ocho años en el MST y hoy en MILES, pero tengo mi independencia política en el sindicato, en el que hay peronistas, kirchneristas, del Polo Obrero… Pero el único objetivo que tenemos es conseguir el aumento del 28% y las condiciones de trabajo”.
“Bajamos al mínimo nuestros reclamos para poder firmar (el acuerdo), pero es evidente que a Macri le conviene este conflicto”, concluyó el sindicalista.
Respuesta a la sanción
El abogado de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (AGTSyP), Luis Ramírez, aseveró hoy que la decisión tomada por el sindicato de rechazar la conciliación obligatoria dictada por el gobierno porteño se debe a que “es una limitación al derecho de huelga”.
Además, expresó que la Subsecretaría de Trabajo porteño, en representación de la Ciudad, “carece de independencia y parcialidad para actuar” en el conflicto.
Por su parte, Ramírez anunció que el sindicato denunciará mañana a la Ciudad ante la OIT y otros organismos defensores de los derechos humanos porque, al sancionar al gremio con una multa de casi cinco millones de pesos, pretende su liquidación.