El Metro de Madrid y el Observatorio madrileño contra la LGBTfobia, una asociación civil, renovaron un acuerdo para capacitar a los empleados de la red en la lucha contra la homofobia.
El convenio comprende la realización de “acciones de sensibilización” y “formación dirigidas a empleados de la compañía y otras iniciativas orientadas a conseguir la igualdad real y la no discriminación ni agresión al colectivo LGBT”.
Yago Blando, coordinador del observatorio, aseguró que este tipo de acciones “es el camino a seguir para conseguir unas redes de transporte seguras para el colectivo LGBT y luchar contra los prejuicios y los vestigios que aún persisten en la sociedad y las instituciones”. El año pasado, de 239 ataques homofóbicos registrados en Madrid, 28 fueron en el transporte público y 17 de ellos en el propio Metro.
No es la primera vez que el Metro de Madrid apuesta a promover la diversidad y la lucha contra la discriminación: en 2015 ya había lanzado una campaña para promover “la igualdad real de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales” y durante la jornada principal de la fiesta del orgullo, a principios de julio pasado, ofreció servicio durante las 24 horas. A su vez, desde 2016, la estación Chueca (emplazada en el barrio homónimo, punto de encuentro de la comunidad LGBT) se encuentra decorada con una bandera del orgullo de más de 750 metros cuadrados (ver foto principal).
En Buenos Aires, en tanto, la estación Santa Fe – Carlos Jáuregui, la primera del mundo en homenajear a un militante LGBT, fue blanco de ataques por parte de grupos que repartieron panfletos de contenido homofóbico a los pasajeros en los que exigían que se retiraran “los murales homosexuales” expuestos en la estación.