Trenes Argentinos Operaciones (SOFSE) lanzó una contratación directa para la compra de tres nuevas locomotoras diésel-eléctricas CRRC para la línea San Martín.
Se trata de tres locomotoras CRRC SDD7 idénticas a las que actualmente circulan en esa línea, que serán fabricadas por CRRC Qishuyan –sucesor de CSR Qishuyan, el proveedor original–.
Se prevé que estas tres máquinas adicionales se sumarán a la flota de 24 asignadas a esa línea: algunas de ellas se encuentran fuera de servicio debido a trabajos de mantenimiento.
La calidad de las locomotoras de la línea San Martín fue objeto de controversia en los últimos años debido a una serie de principios de incendio que obligaron, tras una auditoría de Caterpillar –proveedora de los motores–, al reemplazo de los turbocompresores, señalados como la causa de los desperfectos. La sustitución se hizo por garantía, sin costos para SOFSE.
Cabe recordar que tanto las 24 locomotoras originales como los 160 coches de la línea San Martín –fabricados por CSR Puzhen y también objetados por la baja calidad de sus terminaciones y el rápido desgaste que sufrieron– fueron adquiridos en 2010 durante la gestión de Juan Pablo Schiavi como secretario de Transporte.
Comenzaron a llegar al país en 2013, comenzando a prestar servicios complementarios en las líneas Mitre y Sarmiento (por aquel entonces afectadas por serias crisis de material rodante) y luego en la línea San Martín, primero como semirrápidos y desde abril de 2014 como servicios regulares.
Al margen de que las unidades tractivas luego puedan ser utilizadas en otros servicios o ramales, la decisión de adquirir más locomotoras diésel para el San Martín echa un manto de dudas sobre los plazos de dos proyectos clave para la línea, que permanecen pendientes de adjudicación desde hace varios años: la electrificación –que tiene financiamiento comprometido del BID– y la compra de nuevos trenes eléctricos, licitación en la que TMH es la única oferente.