El pasado miércoles el Jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri firmó el decreto 125/15, mediante el que se aprueba el presupuesto de Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado para el corriente año. Se establecen estimaciones de ingresos corrientes por $ 1.565.844.946 y gastos corrientes por $ 1.506.134.224. En tanto se fijaron los recursos de capital en $ 1.662.860.000 y en $ 1.722.570.722 los gastos de capital.
El presupuesto implica prácticamente un 50% de aumento frente al del año 2014, cuando se habían presupuestado $ 1061 millones de pesos para los ingresos corrientes y $ 1010 millones de pesos para gastos corrientes.
SBASE presentó sus acciones previstas para este año en un Plan de Acción que en líneas generales continúa lo planteado en el ejercicio anterior: continuar con las reparaciones de material rodante y de infraestructura contempladas dentro del “programa de emergencia”, la renovación de vías de la línea E (a cargo de Roggio) y de los aparatos de vía (ADV) de la línea C, actualización de los sistemas de señales de las líneas A, B, D y E y recambio del vetusto sistema de señalamiento ATS de la línea C, que data de 1934, por un nuevo CBTC provisto por Siemens.
Las novedades vienen por el lado de las ampliación de la red. La empresa estatal contempló por primera vez entre las inversiones para este año la extensión de la línea E a Retiro y el Taller Lacarra. Hasta ahora ambas obras estaban a cargo de Nación, que se resistía a hacerse cargo de la instalación de vías y componentes electromecánicos, hallándose prácticamente terminadas las obras civiles.
Por otra parte se incluyó también por primera vez la “Etapa 1” de la línea F, entre Constitución y la Plaza Rodríguez Peña, en Recoleta. El inicio de dicha obra para este año había sido adelantado por este medio el año pasado.
Dentro del programa de inversiones también se contemplan la modernización del Premetro, el reemplazo de escaleras mecánicas antiguas, mejoras en la accesibilidad para personas con movilidad reducida, instalación de ventilación forzada para inyección y extracción de aire, climatización para los trenes de la línea C y la refuncionalización de los nodos Plaza de Mayo, Retiro, Lacroze y Palermo, mientras que el Nodo Obelisco quedó a cargo del Ministerio de Desarrollo Urbano.