La Jueza Graciela Carambia, a cargo del Tribunal Nacional del Trabajo número 70, falló a favor del empleado administrativo Ariel Crivellé, que había sido despedido en 2011 de la empresa Metrovías.
La Justicia ordenó la reincorporación del empleado en cuestión, a la vez que condenó a Metrovías al pago de un resarcimiento económico por entender que el despido de Crivellé se debió a su militancia sindical y afiliación a la AGTSyP (Asociación Gremial de Trabajadores de Subte y Premetro).
La magistrada descartó la justificación esgrimida por Metrovías, en tanto la concesionaria había alegado que el despido del empleado se realizó en el marco de una “reestructuración de personal”.
El gremio celebró la resolución judicial y calificó de “ejemplar” el fallo. “Representa un avance para los trabajadores del sector administrativo de Metrovías en su derecho a organizarse para exigir mejoras en sus condiciones laborales y salariales”, consideraron en un comunicado publicado esta tarde.