Se profundiza el ajuste sobre el sector ferroviario: a la oleada de suspensión de servicios de pasajeros, al congelamiento de la “emergencia ferroviaria”, y al recorte presupuestario previsto para el año próximo se suma la postergación y cancelación de diversas obras en ramales de cargas y de pasajeros.
Ahora fue el turno de obras en el Tren Universitario de La Plata, que fueron dadas de baja por Trenes Argentinos Infraestructura (ADIF).
De acuerdo a un documento oficial, al que tuvo acceso enelSubte, la empresa resolvió dar de baja los trabajos de señalamiento en el ramal, que formaban parte de una licitación lanzada en 2021 y que habían sido adjudicados a la firma Autotrol.
Según consta allí, se trata de una “extinción de mutuo acuerdo del contrato”, la misma figura utilizada para rescindir los convenios de construcción de las estaciones Quilmes Sur, Universidad de Almirante Brown y Hospital Ezeiza de la misma línea Roca. Tal como reveló enelSubte, la paralización de estos trabajos le costó al Estado cerca de 264 millones de pesos, contradiciendo el argumento oficial del ahorro fiscal derivado de la paralización de la obra pública.
El argumento oficial para dar de baja la obra es el hecho de que no fue incluida dentro de los proyectos de la “emergencia ferroviaria”, por no ser considerada prioritaria.
Tal como explicó este medio, la nómina de proyectos, elaborada por las empresas el año pasado, solo incluye aquellos proyectos considerados urgentes por motivos de seguridad operacional. No obstante, numerosas licitaciones aún no han sido lanzadas -y el ritmo de publicación se ha ralentizado notablemente en los últimos meses-, al mismo tiempo que se demora la adjudicación de varias y otras tantas han sido canceladas pese a haber sido incluidas en el paquete de obras de la “emergencia”.
El Gobierno estima que gastó $264 millones por paralizar las obras de nuevas estaciones en el Roca
La cancelación de los trabajos de señalamiento, que formaban parte de las obras de extensión del servicio desde la parada Policlínico hasta el Hospital San Juan de Dios, inaugurada en 2023, se suma al abandono del proyecto de ampliación del recorrido hasta Gambier.
Esta iniciativa, que contemplaba la habilitación de otras cuatro paradas (Cementerio, Avenida 66, Avenida 60 y Gambier), y que había sido objeto de un convenio firmado años atrás entre la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y Trenes Argentinos, no forma parte de los planes actuales de la empresa.
La finalización del proyecto fue recientemente reclamada por el ministro de Transporte bonaerense -y expresidente de Trenes Argentinos-, Martín Marinucci, tras una reunión con el vicepresidente de la UNLP, Fernando Tauber.
“Hoy está pendiente la tercera etapa para poder llegar a Los Hornos. Es fundamental que el gobierno nacional retome este proyecto para lograr su finalización”, aseguró el ministro.
En los últimos días trascendió que las autoridades proyectan retirar las unidades con las que actualmente se presta el servicio -los veteranos pero mecánicamente fiables cochemotores diésel Nohab- para sustituirlos por cochemotores Materfer que actualmente se encuentran apartados de servicio en los talleres Remedios de Escalada.
La noticia generó preocupación dada la mayor propensión a fallas que presentan estas unidades, lo que podría redundar en un empeoramiento de la regularidad del Tren Universitario. A su vez, la decisión es cuestionada debido a que estas unidades podrían aprovecharse mejor si se asignaran a servicios regionales hoy suspendidos por falta de material rodante, como el tren entre Rosario y Cañada de Gómez, o a corredores donde resulta necesario reforzar la oferta, como el servicio Villa Ballester – Zárate. Vale notar, además, que desde la suspensión del servicio a Pinamar también se encuentran ociosos los cochemotores CAF 593 “Camellos”, que no han sido asignados a ningún servicio.
Más obras canceladas
La caída de esta obra se suma a una serie de cancelaciones de licitaciones para diversos proyectos.
A la baja de las obras consideradas “no prioritarias” -como las citadas nuevas estaciones del Roca, obras de estaciones en el Sarmiento, la renovación de vías y señalamiento del San Martín, y las electrificaciones de esta misma línea y del Belgrano Sur-, y a la paralización de proyectos emblemáticos como el viaducto del Belgrano Sur a Constitución y la circunvalación ferroviaria de Santa Fe, se sumó en las últimas semanas una oleada de cancelación de proyectos que sí habían sido incluidos en la “Emergencia Ferroviaria” y que eran considerados como prioritarios.
Entre estos se cuentan la baja por segunda vez de la reforma de la estación Palermo de la línea San Martín, la rehabilitación de la estación Hipólito Yrigoyen de la línea Roca, que está clausurada desde hace casi dos años por obras que nunca comenzaron, la instalación de cerramientos perimetrales en la línea Roca, el mejoramiento de vías en el San Martín Cargas, también dada de baja por segunda vez en menos de un año, o la compra de nuevas triplas para servicios suburbanos y regionales. Al mismo tiempo, se sigue demorando la adjudicación de licitaciones que están pendientes desde hace varios meses.
La seguidilla de caída de proyectos pone en entredicho el argumento oficial de la supuesta prioridad dada a las obras incluidas en la Emergencia.
En un contexto de ajuste cada vez mayor, las empresas admiten que se están “ordenando las prioridades”. En las últimas semanas, los únicos trámites que avanzaron fueron las obras para las líneas privatizadas, como el Urquiza o el Belgrano Norte -los contratos vencidos de sus operadores, por otra parte, fueron nuevamente extendidos-, los destinados a viabilizar la futura privatización de las líneas de gestión estatal, o aquellas reactivadas con criterios electoralistas, como el paso bajo nivel de Junín, frenado desde inicios de la gestión actual.
Efecto elecciones: tras abandonarlo, ahora el Gobierno quiere retomar el bajo nivel de Junín