El antiguo proyecto de extensión de la línea E desde su actual cabecera Bolívar hasta Retiro fue finalmente llevado a cabo con fondos del Estado nacional como consecuencia de la renegociación del contrato de concesión con Metrovías.
De esta forma, con un costo de $346 millones la Secretaría de Transporte de la Nación adjudicó las obras en febrero de 2007 a Benito Roggio e Hijos S.A., -empresa controlante de Metrovías- quien comenzó los trabajos en abril de ese año.
Los trabajos incluirán la construcción de 3 estaciones y una cochera taller y el plazo original de finalización era de 3 años. Sin embargo los grandes atrasos y obstáculos que en el primer año de obra han surgido advierten demoras en la puesta en marcha de la extensión.
Si bien los primeros movimientos se comenzaron a ver en abril de 2007, no fue hasta fines del año pasado que Roggio instaló el obrador en la zona y definió el plan teórico. Los cateos -análisis del suelo- se realizan con constancia desde el año pasado y todos han arrojado resultados alarmantes. Las complicaciones fueron advertidas por este medio en octubre de 2007 y reiteradas por el matutino Clarín semanas atrás.
enelSubte.com anunció el fin de los cateos y el comienzo de las excavaciones en abril de este año, cuando en aquel entonces faltaban sólo pocos días para iniciar los trabajos bajo tierra. Sin embargo, a más de 3 meses de la noticia, aún no se sabe a ciencia cierta cuándo las excavadoras tocarán suelo, ya que aún continúan los estudios de suelo.
Incluso, fuentes aseguraron a este medio que todavía no se han definido algunas cuestiones sobre la construcción de la estación Correo Central debido a las “grandes obstrucciones” que existen en donde deberá ser emplazada la misma. “Dependerá de la reubicación de interferencias la forma en que la estación será construida”, aseguró la constructora a enelSubte.com
Por lo pronto, lo único relevante por estos días es la realización de algunas pequeñas excavaciones sobre la calle Tucumán, a metros de la Avenida Leandro Alem, cuyo objetivo es crear un pozo a nivel de drenaje de obra y luego un túnel hasta el eje de la estación Correo Central para realizar mayores análisis exhaustivos del suelo de las inmediaciones de la misma.