Hace algunas semanas que por el Ministerio de Hacienda suena la frase “avancemos por otros frentes” al asumir que el crédito con el Banco Interamericano de Desarrollo está casi en foja cero.
La administración de Mauricio Macri decidió investigar otras alternativas dado que las condiciones del préstamo con esta entidad internacional no son favorables para la ciudad, y los plazos de aprobación y adjudicación no coinciden con los pretendidos por el empresario al frente del ejecutivo porteño.
Si bien el crédito del BID no fue rechazado, la situación financiera mundial y el complicado panorama político nacional postergan todo tipo de tratativas.
El hundimiento de la imagen presidencial trae como resultado conflictos innegables a nivel local. Dada la firme y pública postura del mandatario de la ciudad de opositor al Gobierno nacional en momentos difíciles, trae como resultado una serie de piedras en el camino de conseguir préstamos para las obras del subterráneo, entre otras.
Un bono pretendido por la Ciudad para obras relacionadas con salud fue rechazado por parte de los legisladores del Frente para la Victoria. Los conflictos con la Coalición Cívica tampoco ayudaron a solucionar la traba.
Además, el ministro de Hacienda de la Ciudad, Néstor Grindetti, envió a la Legislatura el pedido de autorización para la emisión de otro bono, en este caso, para cancelar deudas por unos 800 millones de pesos a proveedores del Estado. Se trata de una obligación que heredó Macri del gobierno de Jorge Telerman y que, para colmo, no estaba presupuestada. La oposición también puso trabas en la aprobación de este bono.
Según el diputado Asinelli, conseguir 2.500 millones de dólares para los subtes “es casi imposible, primero porque tiene que intervenir la Nación, una cuestión que no es menor, y además, porque tanto el BID como el BM deben tener presupuestados entre 2 mil y 3 mil millones de dólares para prestar a la Argentina, es decir, para realizar obras en todo el país”.
Asimismo el diputado advirtió que un trámite ante el BID o el BM para pedir dinero “no llevará menos de un año con mucha suerte, esto quiere decir que quizá Macri termine su mandato sin haber concluido las obras del subte, para no decir que ni siquiera las haya podido empezar”
“Frente a la situación financiera internacional y local, creo que hoy, hablar de subterráneos es complicado. Hacen falta 2.500 millones de dólares para poder desarrollar el plan de subtes; la Ciudad se puede hacer cargo de una parte del costo, pero necesita de la financiación tanto de Nación como de préstamos internacionales”, comentó el presidente del bloque Pro, Oscar Moscariello.
El director del Ente Regulador de Servicios Públicos de la Ciudad, Miguel Von Rozember, reconoció que “la demora en las obras está relacionada con un tema presupuestario.Hacer 10 kilómetros este año, sólo era una propuesta imposible de concretar por una gestión que se inicia y que se encuentra con decisiones políticas equivocadas tomadas por otros gobiernos”
Ayer el Jefe de Gabinete Rodríguez Larreta habló en la Legislatura y admitió las demoras en el préstamo que la Ciudad necesita para hacer subtes.
La verdad sobre este tema ya fue plasmada por el propio gobierno. Ahora resta ver cuáles son esos “otros frentes” con los que se puede seguir conversando para obtener el dinero necesario para “los 10 kilómetros por año”.