El Ministerio de Transporte decidió no renovar el contrato con la concesionaria privada Ferrovías, que opera el ferrocarril Belgrano Norte desde el 1 de abril de 1994 y que caduca el 31 de diciembre próximo.
De acuerdo a lo expresado en la resolución 1339-E/2017, publicada este martes en el Boletín Oficial, el Gobierno resolvió rechazar la prórroga por diez años que habría solicitado al compañía, propiedad del empresario Gabriel Romero, alegando que las acciones de la empresa al frente del Belgrano “no garantizan la prestación eficiente del Servicio Público de Transporte Ferroviario de Pasajeros y, por tanto, no responde en rigor a las necesidades del Estado Concedente”.
Sin embargo, Ferrovías continuará al frente del servicio hasta que se haya seleccionado un nuevo operador privado o, en caso de que fracase una nueva licitación, la operación revierta automáticamente al Estado nacional. Una solución idéntica se adoptó meses atrás para el caso de la línea Urquiza, donde se rechazó un pedido de prórroga formulado por Metrovías mediante una resolución muy similar a la publicada este martes.
Si bien la intención oficial apunta a entregar ambas líneas a nuevos operadores privados, hasta el momento no se hicieron comentarios oficiales respecto a la necesidad y a la lógica que llevaría a tener dos líneas administradas por empresas privadas cuando el resto de la red ferroviaria no sólo se encuentra bajo control estatal sino que va camino a integrarse a través del proyecto RER. La incertidumbre respecto a este último punto cobra particular relevancia si se tiene en cuenta que las resoluciones que rechazaron las prórrogas pedidas tanto por Metrovías como por Ferrovias indican que el 94 por ciento de la cuenta de explotación de ambos ramales es financiado con fondos públicos.
