El pasado martes arrancó la construcción del Metro de Quito, la obra de infraestructura más grande de la capital del Ecuador, según anunció el alcalde Mauricio Rodas. Los trabajos de construcción del Metro arrancan en Quitumbe, donde se construirán las cocheras y la primera estación.
Para la construcción se emplearán máquinas tuneladoras, una tecnología que permite bajar notoriamente los tiempos e incluso los costos si se ejecutan tramos largos o varias líneas en simultáneo. En el caso de Quito se excavarán 23 kilómetros de túneles y trece estaciones de la línea 1 en esta segunda fase. Se espera su inauguración para el primer semestre de 2016.
El Municipio de Quito asumió el financiamiento del 63 % del monto final para la construcción y el 37% el gobierno ecuatoriano. La obra cuenta con financiamiento de organismos internacionales.
El metro será la columna vertebral del Sistema Metropolitano de Transporte. Se estima que, una vez finalizada la construcción de la primera línea de Metro de Quito, unos 400 mil pasajeros utilizarán el servicio diariamente, mientras que generará alrededor de 20 mil empleos directos e indirectos.
Antes de decidir la construcción de una red de metro Quito había optado por el BRT (Metrobús-Q), del que existen cinco corredores. El metro irá reemplazando progresivamente a los corredores troncales del Metrobús, que muestra saturada su capacidad de transporte.
