La planta que Alstom posee en La Rochelle, en el oeste de Francia, despachó semanas atrás la primera unidad de tranvía Citadis para el Metro Ligero de Río de Janeiro, actualmente en construcción. Otras cuatro unidades serán fabricadas en Francia, mientras que las 27 restantes se producirán en la nueva planta de Taubaté, San Pablo, que se especializará en tranvías.
La construcción de la línea de tranvías había sido asignada en 2013 -mediante un contrato llave en mano- a un consorcio integrado por Actua – CCR, Invepar, OTP – Odebrecht Transportes, Riopar, RATP y Benito Roggio Transporte por un monto de 230 millones de euros.
Una de las particularidades de la primera línea a inaugurar, que tendrá 28 kilómetros de largo y 37 estaciones, es que será libre de catenaria: la alimentación eléctrica de las formaciones se hará mediante una toma de energía inferior, en el marco del sistema APS (Alimentación por el Suelo), desarrollado por Alstom. Cabe recordar que esta compañía no sólo proveerá el material rodante y alimentación, sino también señalamiento y telecomunicaciones.
La primera sección estará habilitada hacia mediados de 2016, de cara a los Juegos Olímpicos que se celebrarán el próximo año en la ciudad carioca.