“Hasta el 3 de enero, fecha en la que se firmó el Acta de Transferencia del Servicio de Transporte Subterráneo de la Nación a la Ciudad, el único organismo con facultades de fiscalización y control de la concesión era la Comisión Nacional Reguladora del Transporte (CNRT)”, planteó la compañía en un comunicado.
Para la empresa, “el Ente Único Regulador de los Servicios Público carecía de dichas facultades de control, posición que fue avalada por la propia Corte Suprema de Justicia de la Nación”, y “más allá de la falta de competencia” el reciente informe elaborado “refiere a cuestiones que no tienen relación directa alguna con la seguridad operativa del servicio”.
“Aborda cuestiones accesorias, tales como la rotura de un vidrio en una boletería, o la falta de funcionamiento de lamparitas sobre las formaciones, cuestiones resueltas por la noche (el mantenimiento de las instalaciones fijas en el Subte se realiza fuera del horario de servicio)”, contestó Metrovías.
La empresa remarcó que “el principal actor interesado y preocupado por prestar un servicio con altos estándares de calidad y bajo estrictas normas de seguridad es Metrovías, que desde hace 18 años tiene bajo su responsabilidad la concesión del servicio”.
“En la actualidad el 35 por ciento del personal de Metrovías se encuentra involucrado en las tareas de mantenimiento del servicio y se invierten 269.000.000 de pesos en dicho programa”, completó el comunicado.
Según se informó hoy, el órgano de control porteño reportó que el año pasado inspectores locales detectaron 11.320 fallas en la prestación del subterráneo, de las cuales Metrovías corrigió el 19,2 por ciento.