La concesionaria publicó en las carteleras de las distintas líneas del servicio una carta bajo el título “A nuestros pasajeros”, donde indicó que “en las últimas semanas el Subte fue escenario de un conflicto originado en las negociaciones paritarias con los representantes de sus trabajadores”.
En ese marco, advirtió que “la suspensión de las negociaciones para concretar el traspaso del Subte a la Ciudad le generaron a la empresa graves dificultades”, y remarcó que “si no se perciben es por el esfuerzo de los trabajadores y los recursos económicos asignados por Metrovías”.
Metrovias remarcó que “esta vez fue en el marco del proceso de traspaso del servicio a la ciudad de Buenos Aires, iniciado el 3 de enero pasado y luego suspendido por el gobierno porteño”.
Subrayó que “tras una ardua negociación en el marco de la convocatoria del Ministerio de Trabajo de la Nación, Metrovías reclamó, junto con los trabajadores, la presencia de la ciudad de Buenos Aires en la mesa de negociación, en el marco de la Ley 26.740 de traspaso de subte, colectivos y premetro”.
También señaló que la empresa “presentó una propuesta salarial concreta, asumiendo el compromiso de retomar en agosto las negociaciones paritarias para el sector”. Puntualizó que “este acuerdo evitó que se concrete la amenaza de paro por 72 horas en el servicio, y generó un horizonte de paz social para los próximos meses, que es algo que todos queremos”.
Puso de relieve que “considera necesario e imprescindible que la ciudad de Buenos Aires asuma el control y manejo de la concesión, y de esta manera normalizar la situación en la que se encuentra el Subte para poder planificar a futuro”.
“Que la ciudad se haga cargo, nos permitirá acceder de manera inmediata a fondos vitales para la operación de la empresa”, explicó Metrovías, al tiempo que subrayó que “a pesar de estas circunstancias, queremos llevar la tranquilidad a todos nuestros usuarios de que el Subte es un medio de transporte totalmente seguro”.
Afirmó que “diariamente la empresa implementa las acciones necesarias, priorizando el mantenimiento, para garantizar que cada uno de los 3.200 trenes que se despachan a servicio lo hagan en condiciones seguras de operación para el pasajero y nuestro personal”.
“Hace 18 años que gestionamos este medio de transporte. Contamos con la experiencia y el personal más adecuado para mantener vigente el compromiso de brindar un servicio de transporte público con altos niveles de seguridad, y que constituya una respuesta sustentable a los problemas de movilidad de la ciudad de Buenos Aires”, concluyó la compañía.