Esta semana se cumplen 3 años del primer llamado a licitación internacional para la compra de nuevos coches para la flamante línea H.
En septiembre de 2004 el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires anunció la asignación de 90 millones de dólares del presupuesto de la Ciudad para la compra de 55 coches que conformarían 11 trenes de 5 coches cada uno. Todas las formaciones serían adquiridas con aire acondicionado, y se estimaba que los primeros 18 coches estarían finalizados para julio de 2006, mientras que para 2008 estaría la totalidad de dicha compra.
Sin embargo, la licitación quedó desierta porque todos los oferentes presupuestaron valores más altos de lo establecido, o porque sus propuestas técnicas no se ajustaban a los requerimientos del Gobierno. Desde entonces nunca más hubo intentos de adquirir nuevo material rodante para la primer línea de subte construida en 63 años.
Pasó el tiempo y la línea H no sólo postergó su inauguración sino que cuando se abra al público, rodarán sobre sus rieles trenes que datan de principios del siglo pasado: coches Siemens Orenstein & Koppel construidos a principios de la década del 30′.
Estos trenes fueron quitados de la Línea C -para la cual fueron construidos- y llevados a la línea H, en principio, para “pruebas técnicas”, pero todo parece indicar que serán cuatro formaciones más una de repuesto las que circularán por la nueva línea.
Mientras tanto, el Gobierno Nacional expresó a principios de este año que apoyará económicamente al Gobierno de la Ciudad para adquirir nuevos trenes para la línea, aunque no precisó en qué momento.
El polémico Secretario de Transportes de la Nación Ricardo Jaime, especificó en declaraciones a la prensa que “la Ciudad y la Nación comprarán coches para la nueva línea de Subte”, haciendo referencia a trenes para la línea H y a un refuerzo de 36 coches (6 trenes de 6 coches) para la línea B.
El Gobierno Nacional expresa año tras año sus intenciones de comprar 36 coches para la línea B. En un principio se evaluó la posibilidad de traer más coches usados para reforzar la línea. Luego, el mismo Secretario de Transportes anunció formalmente que “pronto” se incorporarán nuevos coches chinos.
Lo cierto es que Jaime se refería a coches que desean comprar a la empresa oriental CITIC, quien produce trenes económicos para distintas partes del mundo. Irán es uno de los Metros donde circulan coches CITIC (ver imagen).
El real interés del Gobierno Nacional en comprar material chino se debería a que el gigante asiático habría emitido una suerte de “tarjeta de crédito” cuyo límite alcanzaría unos mil millones de dólares, según fuentes consultadas por enelSubte.com.
Por este motivo se habló de hacer una gran compra a la misma empresa tanto para los trenes de la línea B como para los de la línea H.
Ocurre que la línea B está desbordada de pasajeros. Desde que se inauguró su extensión hasta Los Incas, sin incorporar nuevo material rodante, la frecuencia tuvo que reducirse y los usuarios aumentaron. Además, esta línea incrementará 2 estaciones en 2009. Si no se adquieren nuevos trenes, la línea colapsará aún más.
Sin embargo, enelSubte.com pudo constatar que las gestiones de compra de coches nuevos a la empresa CITIC no es más que una proposición que hizo dicha empresa a las autoridades de transporte de la Nación, cuya carpeta fue “encajonada”. No existe en estos momentos ninguna gestión oficial para la compra de nuevo material rodante para el subte.
Asimismo, desde el Gobierno de la Ciudad tampoco hay voluntad alguna, no sólo de incorporar coches nuevos para ninguna línea de subte, sino tampoco de renovar la antigua y poco mantenida flota de trenes que circulan peligrosamente por la red.
La empresa Alstom es actualmente un referente en materia de transportes en la Argentina, no sólo desde que se le adquirió a su filial en Brasil la compra de 96 coches para la línea D, sino también por la reciente puesta en marcha del tranvía en Puerto Madero y por la adjudicación del Tren de Alta Velocidad hacia Rosario y Córdoba.
Además, la empresa se instaló formalmente en la Argentina al montar una sede de sus talleres en Los Hornos en la Ciudad de La Plata.
Alstom también ha presentado propuestas para la incorporación de más material rodante para el Subte, pero todo parece indicar que las compras millonarias se frenarán hasta nuevo aviso.
Comprar trenes no es nada barato: cada formación de 6 coches que actualmente circulan en la línea D tuvo un costo de aproximadamente 8 millones de dólares cada una. Estos trenes fueron afrontados con recursos del Estado Nacional; precios que, por el momento, la Ciudad de Buenos Aires no está en condiciones de pagar.