El Ministerio de Transporte de la Nación resolvió cerrar el servicio de colectivos ArBus, que conectaba varios puntos del centro de la ciudad de Buenos Aires con el Aeroparque Jorge Newbery y el Aeropuerto Internacional de Ezeiza.
En su momento de mayor auge, ArBus llegó a prestar, además, servicios entre Aeroparque y Ezeiza y entre La Plata y Aeroparque.
Con esta decisión, los pasajeros que deseen llegar a las terminales aéreas dependerán del transporte automotor particular, taxis y remises o de los servicios que presta la compañía Tienda León.
Según el Ministerio, el servicio fue cancelado debido a la baja ocupación y al déficit que generaba, estimado en unos 20 millones de pesos anuales. Un comunicado de esa cartera distribuido a la prensa asegura que “sólo el 3% de las personas que llegan al aeropuerto usan un servicio de este tipo. De [ese 3%] sólo el 25% utilizaba ArBus pesar de contar con precios más bajos”.
En contraste, se especula con la posibilidad de que el Gobierno buscara beneficiar a Tienda León, una compañía privada que ahora volverá a monopolizar el servicio. De hecho, el portal La Política Online aseguró que el ministro Guillermo Dietrich había “prometido” a Tienda León la eliminación de ArBus. La firma fue aportante de la campaña presidencial de Mauricio Macri en 2015, reporta el mismo medio.
La desaparición de ArBus pone en evidencia la debilidad de la conexión de transporte público existente entre la ciudad de Buenos Aires y los dos principales aeropuertos que la sirven. Cabe recordar que a Ezeiza sólo llegan desde Buenos Aires las líneas 8 y 51, ambas con altos tiempos de viaje y escaso atractivo para los pasajeros, mientras que al Aeroparque arriban algunos ramales de las líneas 33, 37, 45 y 160, todas ellas con cabecera en la Ciudad Universitaria.
A diferencia de numerosos aeropuertos alrededor del mundo, ni Ezeiza ni Aeroparque cuentan con conexiones ferroviarias a pesar de la facilidad para construirlas. Los trenes de la línea Belgrano Norte, por ejemplo, pasan por detrás del Aeroparque sin observar parada -un plan para construir allí una estación fue cancelado en 2015 luego de un dictamen adverso de la ANAC y AUSA-. La extensión del Subte al aeroparque fue la segunda propuesta más votada por los porteños en una plataforma de participación del Gobierno de la Ciudad, apenas por debajo de la extensión del horario de funcionamiento de la red.
En el caso de Ezeiza se requerirían mayores obras, aunque de relativa baja complejidad: varias propuestas estudiadas estiman que deben construirse unos 8 km de vías desde la vía principal del Ferrocarril Roca, ramal que llega electrificado al centro de Ezeiza. Un proyecto de esta naturaleza había sido descartado por Dietrich en mayo del año pasado: el titular de Transporte aseguró que la demanda de viajes no justificaba la inversión.