En nuevo episodio de la moda de agregar nombres dobles a las estaciones de Subte, la Legislatura porteña buscará incorporar el nombre Miguel Abuelo a la denominación de la estación Ministro Carranza de la línea D.
El pasado viernes 13 de julio se realizó la segunda audiencia prevista por la ley para este tipo de medidas, por lo que ahora sólo resta la aprobación en segunda lectura en el recinto. Así, la estación Carranza se suma al creciente listado de estaciones que agregan un segundo nombre a su denominación mientras no se prevé la construcción de estaciones nuevas una vez que se inaugure la prolongación de la línea E a Retiro.
La iniciativa fue propuesta por el legislador peronista Claudio Heredia, quien expresó que “nos comprometimos a trabajar junto a quienes lo vienen haciendo desde hace mucho tiempo para dar visibilidad a la obra de Miguel” y aseguró que “presentamos el proyecto de ley para que todos los vecinos que transitan en el Subte lo tengan presente como referencia musical, artística y de nuestra cultura nacional”.
La construcción de la estación Carranza comenzó en 1969 cuando Subterráneos de Buenos Aires inició los trabajos de prolongación de la línea D desde Palermo hacia Belgrano y Núñez. Sin embargo, los trabajos fueron interrumpidos luego de un derrumbe a la altura de la calle Humboldt, por lo que el túnel construido hasta entonces pasó a utilizarse como cochera. En 1987, las obras se reanudaron y al año siguiente se inauguró el “apeadero Carranza”: un andén provisorio construido sobre la vía este en el tramo de túnel inmediatamente anterior a donde hoy se encuentra la estación, inaugurada en forma definitiva el 31 de diciembre de 1993. Dicho acto fue aprovechado por las autoridades de entonces para presentar a la entonces flamante concesionaria Metrovías, que se haría cargo del servicio del Subte al día siguiente.
El nombre de la estación siempre fue objeto de polémica. Originalmente se iba a llamar General Savio, en homenaje al militar que impulsó la industria del acero en Argentina aprovechando la cercanía a la entonces sede de Fabricaciones Militares con la nueva estación. La muerte de Roque Carranza, entonces ministro de Defensa del gobierno de Raúl Alfonsín, en 1986 cambió los planes y se dispuso que se le coloque su nombre. No obstante, su presunta participación en el atentado del 15 de abril de 1953 en la estación Plaza de Mayo de la línea A -mientras el entonces presidente Juan Domingo Perón daba un discurso desde el balcón de la Casa Rosada- fue motivo de objeción para que precisamente una estación de Subte lo homenajeara.