El viernes pasado el jefe de gobierno Mauricio Macri encabezó el acto de inauguración de las estaciones Echeverría y Juan Manuel de Rosas, con su respectiva cochera. Habitualmente, pasadas algunas horas desde el acto oficial, las instalaciones se entregan a la concesionaria Metrovías para que comience a operarlas.
En lo que constituye una irregularidad, se transfirió con rapidez las estaciones que comenzaron a ser operadas cerca de las cuatro de la tarde de ese mismo viernes, pero en cambio SBASE no entregó en concesión la cochera-taller, que formalmente sigue en posesión de la empresa estatal, informaron diversas fuentes en diálogo con enelSubte.com.
No sólo la cochera, indispensable para la correcta operación de la extensión, no ha sido entregada, sino que además personal de Metrovías ingresó a ella estacionando trenes bajo concesión de la empresa, en lo que constituye una situación sin precedentes.
La situación, sumada a las denuncias del gremio respecto de la existencia de filtraciones en el área (que han sido reconocidas por la propia SBASE), revela la improvisación con la que se manejó la administración porteña respecto de esta obra. La cercanía de las elecciones y el inicio de la veda electoral para actos públicos de gobierno que iniciaba al día siguiente parecen haber influido más en la decisión de la apertura, que las condiciones en que se encontraba la extensión y la finalización de los trámites de transferencia.
TRAS NEGARLAS, SBASE COMENZÓ A REPARAR FILTRACIONES EN ESTACIÓN ROSAS
La compañía estatal, luego de desmentir la existencia de filtraciones y luego desdecirse por boca de su propio presidente, Juan Pablo Piccardo, dio inicio a tareas de reparación de las mismas en las áreas habilitadas al público de la estación Juan Manuel de Rosas. Desde el pasado miércoles las estaciones Echeverría y Rosas no reciben pasajeros.
Estado de la estación, a pocos días de su apertura
Vallado tras el cual trabaja el personal de reparación de filtraciones