De amenazas, lesiones, injurias, delito contra la libertad de reunión y hurto acusa el Cuerpo de Delegados a los agresores que interrumpieron la conferencia de prensa que estaba desarrollándose el pasado lunes 17 en el Hotel Bauen, donde se anunciaba un plan de lucha por reclamos a la concesionaria que finalmente y en repudio a lo sucedido desembocó en paro de actividades. Además de los destrozos provocados en el lugar, agregan hechos ocurridos más tarde en la estación Primera Junta y la irrupción de una “numerosa patota” en Federico Lacroze y Plaza de los Virreyes el martes por la tarde, cuando se cumplía la jornada de paro y Metrovías corría el servicio con personal jerárquico.
Todos estos hechos fueron denunciados el viernes 21 ante dependencias de la Cámara en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal, según informan los Delegados. Acusan a los individuos que causaron los incidentes –quienes se retiraron del Bauen en un colectivo fuera de línea– de ser una patota al servicio de la conducción de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), sindicato al que pertenecen los trabajadores del subterráneo. Ocurre que hace tiempo existen fuertes tensiones entre la conducción peronista y los delegados de base, la mayoría de ellos ligados con la izquierda.
Finaliza el comunicado de prensa declarando la intención del Cuerpo de Delegados de “esclarecer y repudiar la política de hostigamiento, persecusión y represión sobre los trabajadores del Subte, quienes vienen llevando adelante sus reclamos de manera pacífica y democrática en su pleno derecho de reclamar lo que consideran justo y necesario”.