El pasado 6 de febrero comenzó a funcionar el primer tramo de la línea 2 del tranvía de Río de Janeiro, oficialmente denominado VLT Carioca, entre las estaciones Praça XV y Saara.
Una vez completa, esta nueva línea permitirá conectar “la terminal del Ferry, las estaciones de trenes, la terminal de autobuses Américo Fontelle y el Morro da Providencia al resto del sistema”. El servicio opera entre las 6 y las 24 horas, con una tarifa de 3,80 reales. Se estima que una vez finalizadas todas las obras, que contemplan la construcción de una tercera línea, el tranvía funcionará durante las 24 horas del día.
Se estima que la red tranviaria ayudará a reducir en un 66% la cantidad de buses y en un 15% la cantidad de vehículos particulares que ingresan al centro de Río.
En la planificación y construcción de la red participó un equipo de quince ingenieros y técnicos argentinos pertenecientes a Benito Roggio Transporte (BRT), controlante de Metrovías, la operadora del Subte porteño, “aportando el know-how y la experiencia adquirida en diferentes proyectos implementados en Argentina”, destacó BRT en un comunicado.
La construcción y operación por un plazo de 25 años de la red tranviaria está a cargo del consorcio VLT Carioca, conformado por las compañías CCR, Invepar, Odebrecht Transportes, Riopar, RATP do Brasil (filial de la operadora estatal del Metro de París) y la ya citada Benito Roggio Transportes.
Cabe recordar que la primera línea había comenzado a operar en junio del año pasado. Los coches para el tranvía fueron provistos por Alstom. La primera formación se fabricó en la planta de La Rochelle, Francia, y se entregó en 2015. El resto de las unidades fueron construidas en Brasil, en una fábrica especializada en tranvías ubicada en Taubaté, Estado de San Pablo. Se trata de coches correspondientes al modelo Citadis, de aspecto similar al que circulaba en el malogrado Tranvía de Puerto Madero y que será puesto en funcionamiento próximamente en el Premetro. A diferencia de éste último, la toma de energía se realiza por contacto inferior, una tecnología desarrollada por una filial Alstom conocida como APS (alimentación por el suelo).