3 diciembre 2024

Buscarán declarar Patrimonio de la Humanidad a la línea A, los coches La Brugeoise y a la Avenida de Mayo

Más leídos

La Red del Patrimonio convoca a una reunión para este lunes a las 18 en el Centro de la Cooperación (avenida Corrientes 1543, entre Paraná y Montevideo) para delinear una presentación ante la UNESCO para que la línea A, sus coches La Brugeoise y la Avenida de Mayo sean declarados Patrimonio de la Humanidad. Esta organización, que se formó a mediados del año pasado y está integrada por más de 50 asociaciones que se dedican al cuidado del patrimonio cultural, invita al público en general a participar y a informarse sobre las acciones que buscarán llevar a cabo para lograr sus objetivos. Estas incluyen también la presentación de un recurso de amparo, que se sustanciará en los próximos días, para que las autoridades eviten que los Brugeoise sean vandalizados tras su retiro.

La licenciada Mónica Capano, una de las organizadoras de la iniciativa, se desempeñó en el Consejo Asesor en Asuntos Patrimoniales (CAAP) hasta que en julio pasado el macrismo logró desplazarla molesto por los cuestionamientos que formulaba a la laxitud del Consejo a la hora de aprobar demoliciones de edificios antiguos. En una conversación con enelSubte.com explicó que no se oponen al ingreso de nuevas formaciones al servicio de la línea A ni a que los Brugeoise sean adaptados para compartir vías con ellos. “No somos puristas. Creo que las posturas extremas que hablan de conservarlos sin ninguna alteración o de retirarlos sin más trámite conspiran contra la preservación. En ese sentido entendemos que el patrimonio debe refuncionalizarse de acuerdo a las exigencias actuales”. Al respecto comentó que “yo siempre cito el caso de un pueblo cerca de Charleston, en Estados Unidos, que es completamente victoriano en su arquitectura pero las personas que viven en los edificios gozan de las comodidades modernas”.

Respecto a los trenes belgas, Capano afirmó que “se busca proteger sobre todo la dimensión intangible del patrimonio”. En ese sentido, la iniciativa destaca no sólo el valor de los trenes en tanto objetos sino fundamentalmente como depositarios de prácticas sociales y culturales como, por ejemplo, “las habilidades técnicas desarrolladas para poder mantenerlos operativos hasta ahora”. La experta señaló que “no queremos que los trenes se conviertan en cafeterías o bicleteros sino que se los conserve como tales. El patrimonio debe ser entendido como algo vivo que nos interpela en la vida cotidiana”.

Según fuentes relacionadas con la iniciativa, el modelo a seguir será el de la línea 1 del metro de Budapest, que data de 1896 y fue reconocida por la UNESCO en 2002. Dicha traza conserva parte de su flota original en condiciones operativas para fines turísticos mientras el servicio es asegurado con trenes modernos. Sin embargo, remarcan que el caso argentino tiene particularidades que lo vuelven relevante para que la petición prospere: la mayoría de los trenes originales continúan en servicio tras 99 años y la línea A coincide además en parte de su recorrido con la Avenida de Mayo, considerada el “eje cívico” de la Ciudad, formando así una unidad patrimonial.

Suscribite a nuestro Newsletter

Las últimas novedades directo a tu casilla de e-mail

Destacados

Ultimos artículos

Artículos relacionados