Mediante un proyecto de resolución presentado ante la Cámara Baja, Alfonsín propone que la AGN realice una auditoría sobre el mantenimiento y la seguridad del servicio de subterráneos y sobre los controles realizados por la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) a fin de determinar posibles intervenciones tanto en la empresa como en dicho organismo. “Los Gobiernos nacional y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires actualmente sostienen una contienda por el manejo de la red de transporte subterráneo que, de acuerdo, a los propios interlocutores oficiales podría redundar en un deterioro del servicio en general y, particularmente, de los recaudos adoptados para garantizar la seguridad de los usuarios”, sostiene Alfonsín en su escrito.
El diputado rescató la labor realizada por la Auditoría al decir que “los informes realizados por la AGN han servido, como ningún otro insumo, para reconstruir el prolongado proceso de abandono y deterioro al que han sido entregados”. “Desafortunadamente, la pasividad de las autoridades y organismos de control no ha impedido evitar la tragedia de Once, pero hay mucho que podemos hacer para evitar que se repitan sucesos trágicos como el ocurrido el 22 de Febrero próximo pasado”.
En otro pasaje de los fundamentos de su pedido, Alfonsín indica que “se ha anunciado públicamente que hoy los subtes son inseguros para los usuarios, y esto hace que la discusión de fondo pase a un segundo plano y sugiere que concentremos nuestros esfuerzos en proteger a los usuarios”. “Por ello creemos necesario solicitar a la Auditoría General de la Nación la realización de un informe exhaustivo acerca del funcionamiento, la infraestructura, las inversiones realizadas y los recursos destinados a solventar el funcionamiento de la red de subterráneos que permita a la ciudadanía y a sus representantes en este Congreso conocer el estado actual de la situación y delinear posibles líneas de intervención a futuro”