La línea C del Subte resultó interrumpida esta mañana luego de que una formación presentara inconvenientes con la manija de frenado, que “se encontraba defectuosa” y “giraba en falso”.
El tren afectado debió detenerse en la estación Independencia, “a la espera” de que trajeran una nueva manija para continuar viaje. Sin embargo, en el entretiempo, un usuario agredió salvajemente al conductor del tren -de apellido Cáncer- como puede verse en las imágenes que acompañan esta nota.
Según informó Metrovías, el conductor golpeado se encuentra “estable” tras haber sido atendido por personal del SAME y fue trasladado “para observación al Sanatorio Dupuytren”. La empresa repudió el acto de violencia: “Metrovías repudia enérgicamente toda clase de agresión a su personal, y se encuentra trabajando junto al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires en el refuerzo de la seguridad ante la preocupante situación ocurrida y en pos de prevenir que este tipo de hechos se reiteren”, expresó un comunicado.
Desde hace algunas semanas los trabajadores del Subte advertían un aumento de las agresiones físicas al personal ante demoras y eventualidades no imputables a conflictos gremiales. “La gente se la agarra con nosotros cuando hay problemas técnicos y no es aceptable”, dijo un gremialista en diálogo con este medio. Durante el mes pasado, dos mujeres –una conductora y una guarda– fueron agredidas salvajemente en las líneas H y D, respectivamente.
La Subsecretaría de Trabajo del GCBA convocó a una reunión que comenzó a las 13 horas, mediante la que se intenta destrabar el conflicto y levantar la medida que mantiene a la línea interrumpida desde esta mañana.
Por la tarde, el Secretario General de AGTSyP, Beto Pianelli, aseguró que la línea permanecerá en paro por lo que resta de la jornada y recién abrirá mañana por la mañana. El gremialista manifestó que “hay tres o cuatro agresiones que sufren por semana los trabajadores de parte de los pasajeros que reaccionan así por el mal mantenimiento del servicio”.
