Las nuevas autoridades de la Operadora Ferroviaria del Estado mantendrán una reunión con sindicalistas del gremio La Fraternidad, que nuclea a los conductores de trenes, para analizar la continuidad a futuro de los servicios entre Cipolletti y Neuquén, que fueran habilitados el invierno pasado.
El gremio apunta a que “por lo menos que se mantenga lo que está” (en referencia al servicio que une ambas estaciones), ya que apuestan a conservar los cien puestos de trabajo que ha generado la reactivación del servicio ferroviario de pasajeros entre ambas ciudades, entre conductores, banderilleros, mecánicos y personal de estación.
El diario Río Negro se hizo eco de la situación, manifestando que “con la asunción de Mauricio Macri a la presidencia de la Nación, las certezas sobre la continuidad de muchas de las políticas implementadas por el anterior gobierno comenzaron a declinar”.
Todo esto pese a que el servicio Cipolletti – Neuquén está incluido en el Plan Quinquenal que Randazzo entregara a Dietrich semanas atrás y que cuenta con proyectos para extenderse por ambos extremos a Plottier y General Roca, con perspectivas de cuadruplicarse la cantidad de pasajeros transportados para 2020.
En la actualidad, el tren opera con dos duplas de coche-motor Materfer de lunes a sábado y transporta un promedio de entre 3000 y 4000 pasajeros diarios. Entre dichas estaciones no corrían servicios de pasajeros desde 1993, lo que motivó que la reactivación generara un gran entusiasmo entre la población y hasta el surgimiento de nuevos proyectos educativos.