Desde hace varias semanas, el servicio de la línea D se presta con importantes demoras, lo que ha provocado un incremento de las quejas de los usuarios en las redes sociales. Varios lectores se comunicaron con este medio para denunciar la situación que, según afirman, recrudece en las horas pico.
Ante una consulta de enelSubte, voceros de la operadora Metrovías explicaron que las eventualidades registradas durante mayo se debieron a diversas razones. La primera de ellas son “fallas en el material rodante”, que afectan tanto a los veteranos Fiat Materfer, algunos de los cuales fueron transferidos a la línea E, como a los más modernos Alstom.
La segunda causa de las demoras está relacionada con “un problema con la tensión de los circuitos de vía, el cual provoca ocupaciones ficticias […] principalmente en la hora pico del servicio”, es decir, una falla en el sistema de señales, que detecta un tren donde no lo hay. Esta eventualidad, cuyo pico según la empresa se dio entre el 8 y el 18 de mayo, estuvo provocada por “la última tormenta fuerte que tuvo la ciudad, el 8 de mayo”, cuando “ingresó un fuerte caudal de agua en las instalaciones de la red”. La solución al problema, explicaron, es “gradual, ya que con el drenaje del agua cada noche se deben hacer mediciones para regular la tensión”.
Por último, la empresa agregó que varias afectaciones al servicio se debieron a “usuarios que han requerido atención médica a bordo de las formaciones”, algo que sigue generando demoras pese al cambio de los protocolos de atención decidido por SBASE hace ya dos años.