Trenes Argentinos Operaciones (SOFSE) habilitó hoy la venta de pasajes de larga distancia para el mes de julio. Se mantiene la misma oferta del mes anterior, con aumentos de precios en todos los corredores.
Los precios de los pasajes pasan de los actuales $25.000 a $30.000 en el tren entre Plaza Constitución y Mar del Plata, de $22.000 a $23.000 en el servicio a Pinamar, de $10.000 a $12.000 en el tren de Retiro a Rosario, de $20.000 a $23.000 a Córdoba, de $26.000 a $30.000 en el tren a Tucumán, de $10.000 a $ 12.000 en el tren de Once a Bragado y de $16.000 a $18.000 en el caso del servicio a Pehuajó.
Continúa vigente el descuento del 10% por compra online, del 40% para jubilados, y del 50% para menores. Vale notar que los menores de 3 años y quienes posean el certificado único de discapacidad (CUD) viajan sin costo. También sigue aplicando la confirmación obligatoria del viaje 72 horas antes de la partida del servicio.
Las tarifas de los trenes regionales Rosario Norte – Cañada de Gómez y La Banda – Fernández, cuyos valores dependen de los servicios de larga distancia con los que comparten recorrido, se ubican en $800 y $400 respectivamente.
Servicios cancelados e interrumpidos
Continúa interrumpido el servicio semanal a Justo Daract, que no se presta desde la colisión ocurrida en cercanías de la estación Palermo el 10 de mayo pasado. Desde que ocurrió el siniestro los trenes de la la línea San Martín no llegan a Retiro. Si bien el tren hacia Junín fue reanudado el 10 de junio –con cabecera en la estación Caseros–, no hay novedades respecto a la vuelta del servicio a San Luis.
El trayecto hacia Palmira, por su parte, continúa interrumpido. Según el comunicado de la operadora ferroviaria “el servicio […] quedó suspendido, momentáneamente, ya que luego de realizar un estudio pormenorizado de la infraestructura se pudo concluir que las condiciones del tendido de vías no brinda las garantías operativas necesarias para el traslado de pasajeros“.
A estas afectaciones se suman los recortes implementados en los últimos meses, como la suspensión del servicio Expreso Rosario y la reducción de frecuencias del servicio a Pinamar, que se mantienen sin cambios.
También continúa suspendido el servicio entre Plaza Constitución y Bahía Blanca, que no funciona desde el descarrilamiento de marzo del año pasado. En este último caso, el trayecto fue retirado tanto del mapa de larga distancia como del listado de tramos disponibles en la página de Trenes Argentinos, lo que hace suponer una suspensión definitiva.
Continua vigente un cambio implementado en junio, que es el agregado de un coche dormitorio en el servicio a Rosario: estará disponible los jueves y viernes hacia Rosario y los viernes y sábados hacia Buenos Aires.
Los trenes de larga distancia experimentan un proceso de deterioro que se agrava con el correr de los meses: insuficiencia de insumos en coches comedor, baños clausurados, falta de material tractivo e incumplimiento de horarios se combinan con las falencias estructurales como falta de material rodante, carencia de repuestos para mantenimiento de flota y problemas de infraestructura en aquellos corredores que aún no han sido renovados.
Si bien la mayoría de los trenes interurbanos continúa corriendo, el futuro es por demás incierto. No sólo el Gobierno pretende con la Ley Bases privatizar o concesionar Trenes Argentinos, sino que la “emergencia ferroviaria” recientemente decretada prevé una reducción de servicios y frecuencias de alcances todavía desconocidos.
